De antigua comisaría de policía nacional a nuevo cuartel de la Guardia Civil. El Ministerio del Interior ha culminado ya los trabajos de reforma del edificio situado en la calle Marco Agripa para el traslado de parte de las oficinas de la Benemérita de la Escuela de Tráfico a la barriada de la Argentina. Según confirma la Comandancia de la Guardia Civil de Badajoz, la adecuación del inmueble está terminada a la espera de la dotación de mobiliario y «pequeños requisitos de trámite en documentación».

Allí se instalarán el Puesto de Seguridad Ciudadana, la Plana Mayor de la Compañía Territorial de Mérida, el Seprona, Intervención de Armas y la Policía Judicial de la Guardia Civil. Estos servicios ahora se ubican en la Escuela de Tráfico, donde seguirán permaneciendo los efectivos de Tráfico y la academia de formación. No obstante, aún no hay una fecha fijada para el traslado.

Las dependencias que se han rehabilitado, de propiedad municipal, albergaron durante 50 años la comisaría de Policía Nacional. Tras la marcha de esta al Tercer Milenio, el Ayuntamiento de Mérida cedió el inmueble en el 2012 a la Comandancia de la Guardia Civil para que pudiera instalarse allí el acuartelamiento general de Mérida.

INSTALACIONES CERCANAS / El objetivo es que la ciudad pudiera contar con unas instalaciones adecuadas y más cercanas que la Escuela de Tráfico para presentar denuncias o realizar cualquier tipo de trámite. Tras un parón de dos años, las gestiones para el traslado se retomaron en el 2014 con la idea de que este estuviera culminado en el 2015, pero no fue hasta dos años después, en febrero del 2017, cuando el Ministerio del Interior adjudicó los trabajos a la empresa pacense Construcciones Campo Extremeño S.L. por un importe total de 276.104 euros.

La rebaja sobre el tipo de licitación alcanzó el 32%, pues Interior sacó la obra a concurso por 405.945 euros. El edificio, de 1.600 cuadrados, consta de tres plantas y un aparcamiento. El inmueble solo albergará dependencias oficiales y no viviendas, tal y como la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) de Badajoz había reclamado en los últimos años.

La adecuación del imueble no ha estado exenta de polémica, después de que el Ministerio diera la orden de talar dos árboles de gran envergadura que estaban en el parque anexo al edificio para poder instalar las cámaras de seguridad, ya que quitaban la visión de esta parte del perímetro.