La segunda fase de las obras del hospital supondrá una remodelación de todo el edificio, que afectará tanto al cuerpo trasero como a las dos alas de hospitalización, por el que entre el 65% o el 70% de las habitaciones serán individuales. El hospital mantendrá las 300 camas actuales.
Así lo afirmó ayer el gerente del Area de Salud de Mérida, Cándido Sánchez Cabrera, quien explicó que las obras de ampliación va a transformar el edificio principal, "ya que es una ampliación de arriba abajo de todo el bloque posterior, donde se meten servicios nuevos como Cirugía Mayor Ambulatoria, todos los quirófanos, la Unidad de Cuidados Paliativos, la Unidad de Cuidados Intensivos y se hace una serie de hospitales de día, médicos y quirúrgicos".
UNIDADES
En este bloque de nueva construcción también estarán las nuevas unidades que tiene ahora el hospital, como los servicios de resonancia magnética, el acelerador lineal, la litotricia o la hemodinámica, "que no estaban en el proyecto inicial", indicó Cabrera.
Las obras, cuyos preparativos comenzarán la próxima semana, también van a modificar la rutina del trabajo durante un tiempo. Así, en la primera fase se perderá un 25% de las camas de hospitalización, "ya que cuando actuemos sobre un ala tenemos que cerrar la de arriba y la de abajo, por los derribos y por las conexiones, lo que va a suponer perder camas en el hospital y va a dificultar la atención sanitaria que se presta, pero tenemos el hospital del Perpetuo Socorro, en Badajoz, y el hospital de Zafra e intentaremos paliar las dificultades que se presenten".
En este sentido, Sánchez Cabrera manifestó que hay un plan de temporalización de la obra, que junto con el proyecto, se dará a conocer a los trabajadores del Area de Salud de Mérida en una asamblea.
DETERIORO
El gerente indicó que las obras acabarán con problemas derivados del deterioro de las instalaciones del hospital, como el aire acondicionado en los meses de verano, "y aquí se arreglará todo, ya que cuando actuemos sobre las alas sólo dejaremos las estructuras y tabiques, y las instalaciones serán todas nuevas".
En cuanto a la estructura del hospital, algunos servicios continuarán el mismo lugar donde están ahora, "pero la mayoría se verán afectados y trasladados".
Respecto a las habitaciones individuales, el gerente indicó que serán dobles hasta que la obra no esté concluida, "para no perder demasiadas camas, pero luego le daremos un uso individual", manifestó.
Las obras de la primera fase de la reforma del hospital se iniciaron en 1997 y concluyeron con la construcción del Servicio de Urgencias y los edificios de Consultas Externas.
