Un centenar de familias de la calle Platón, en la urbanización Jardín de Mérida, fueron desalojadas en la tarde de ayer de sus casas debido a un escape de gas provocado por una excavadora que estaba trabajando en la construcción de un acerado de un bloque de pisos.

El desalojo de las viviendas, tanto de pisos como de adosados, se inició a las tres de la tarde, aunque el olor a gas se empezó a detectar sobre las 14.20 horas. Los vecinos, entre los que había personas mayores y niños, permanecieron en la calle hasta las seis de la tarde, cuando los bomberos y la policía local autorizaron la vuelta a sus casas. El suministro de gas se restableció a las 19.30 horas.

La fuga de gas fue detectada por un vecino, Enrique Carroza, tanto por el olor en la calle como por el ruido del escape. Inmediatamente se percató que el gas salía de una tubería rota por una excavadora que hacía un acerado y cerca de una hoguera que un grupo de albañiles había encendido para calentarse.

Al momento dio aviso a la policía local que a las tres de la tarde ordenó, casa por casa, el desalojo de las viviendas, tras cerrar la llave del depósito de propano, de Cepsa, situado cerca del cementerio. También acudieron efectivos de los bomberos y de la Policía Nacional.

TECNICOS DE TALAVERA Posteriormente comenzó la búsqueda de los técnicos que debían arreglar la avería. En un principio, desde la empresa se indicó que estaban en Sevilla y en Jaraíz, aunque finalmente se desplazaron desde Talavera la Real.

El corte del suministro afectó, además de a la calle Platón, a la urbanización, unas 200 familias.

Enrique Carroza lamentó que nadie del equipo de gobierno se hubiera puesto en contacto con ellos para ofrecer un hotel o un albergue, ya que hacía frío y las personas mayores no tenían donde refugiarse.

José Fernández, otro vecino, también mostró "su indignación" por la ausencia de representantes del gobierno local, "nadie se ha interesado por nosotros", se lamentó.

El portavoz del grupo socialista, Angel Calle, que se desplazó a la calle Platón, criticó que "el ayuntamiento no tenga un plan de emergencia para situaciones de este tipo, ni un plano con la situación de las llaves de gas o del estado de los hidrantes".