El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) acaba de sacar a licitación pública un estudio arqueológico de las inmediaciones afectadas por el trazado del acceso del AVE a la ciudad, que posteriormente servirá de base para la redacción del proyecto definitivo de la plataforma de línea de alta velocidad entre Madrid y Lisboa, a su paso por Mérida.

Las prospecciones realizadas en la fase del Estudio Informativo del acceso a la ciudad dieron como resultado la aparición de varios yacimientos que podrían verse afectados por las obras. En la zona próxima al recinto ferial, lugar elegido por el ayuntamiento para ubicar la estación del AVE, la del tren convencional y la de autobuses, se encuentran al menos una alcantarilla romana y dos mausoleos. El ayuntamiento mostró su intención de integrar los restos las obras, con el fin de que no se cambiara la ubicación elegida, un deseo que fue avalado por el Consorcio de la Ciudad Monumental, que determinó que los restos aparecidos no debían ser un obstáculo para la llegada del AVE.

No obstante, en junio del 2008 el Ministerio de Fomento y el ayuntamiento acordaron desplazar cien metros la línea del ferrocarril y la estación intermodal, por lo que estos restos dejarían de verse afectados, según indica el gerente de la Empresa Municipal de Transportes, Angel Caballero, que tiene encomendada la tarea de coordinar todos los trabajos relativos a la llegada de la alta velocidad ferroviaria a la ciudad.

El estudio ahora licitado tiene un plazo de ejecución de 10 meses por un presupuesto de 110.344 euros, estará coordinado por la Dirección General de Patrimonio de la Junta, con el fin de garantizar la protección de los restos que pudieran aparecer. Su función es realizar una intensa investigación en la zona en búsqueda de nuevos restos para determinar el impacto que pudieran sufrir debido a las obras, así como el establecimiento de las medidas correctoras necesarias para proteger los yacimientos.

El tramo de acceso a Mérida discurre por los términos municipales de Mérida y Esparragalejo. Está constituido por una doble vía electrificada a lo largo de casi 20 kilómetros.