No quería escribir este año sobre este tema, para no herir susceptibilidades de aquellos que solo ven las cosas por un agujero, pero a fuerza de ser sincero tengo que decir que cada año se ha venido superando este acontecimiento, lo que redunda en beneficio de Mérida y de toda Extremadura. Este año chapeau .

No obstante, y para olvidar actitudes retrógradas me gustaría hacer algunas consideraciones, por si podemos mejorar esta gala artística que ya está siendo la envidia de toda España. Me consta que existen dificultades económicas en nuestra sociedad, pero las actividades artísticas también necesitan apoyo, y los Premios Ceres han sido un acierto de la Consejería de Cultura.

Pero volviendo al tema que nos ocupa, no es de recibo que se hayan puesto 3.000 entradas a disposición del público, cuando el aforo es muchísimo mayor. Personas muy interesadas en asistir al acto, después de desplazarse a muchos kilómetros de sus residencias, han tenido que darse la vuelta y quedarse con las ganas.

A los que tanto prodigan el costo de los 550.000 euros en la gala, me gustaría recordarles que el festival Contempopránea para Badajoz ha costado 600.000 euros, que es mucho mayor; y 417.000 euros el Womad de Cáceres, y los resultados finales no pueden ni compararse. ¡Seamos serios!

¡Ah!, y dos cosas más para recomendar a la dirección técnica y económica, y es que por un mínimo económico más, la retrasmisión debería ser en directo para toda España, igual que los Goya, ya que puestos a ser rigurosos, nuestro teatro, es el más antiguo y además el teatro de Tália, es el espectáculo más importante de las artes escénicas.

Me gustaría recomendar a quien corresponda, que sea más inflexible con el ropaje de los 'faranduleros' de la ceremonia y se olviden de las camisas por fuera del pantalón y se agarren a las corbatas y pajaritas que dicen más. Por último, quiero felicitar a don Miguel Angel Muñoz por su participación en la entrega de los premios. ¡Enhorabuena!