El alcalde de Mérida, Angel Calle, mostró ayer su satisfacción por el paso dado por el proyecto que garantizará el abastecimiento de la durante las tres próximas décadas. Es la solución que esperan desde hace años los vecinos de la Zona Norte, San Juan, Santa Eulalia o Juan Canet a quienes el agua llega a sus casas con poca presión.

En cuanto al impacto ambiental del proyecto, el ministerio considera compatible la obra sobre la atmósfera, la vegetación y los usos del suelo, la fauna, los espacios naturales protegidos y las vías pecuarias. Considera moderado el impacto sobre la hidrología y el patrimonio cultural, pero dispone la necesidad de acometer medidas correctoras.