Ya no ladran los beneficiarios, ya no chillan, no se quejan como antes de los excrementos de los gorriones en las calles de la ciudad, parece como si se hubieran volatizado. Las baldosas ya no están levantadas, la señalización horizontal y vertical están todas bien, según el nuevo equipo de gobierno la presión del agua se solucionará por vía de urgencia. Por cierto, en Rambla Mártir Santa Eulalia desde hace treinta años tenemos menos presión de agua que en otras zonas de la ciudad y jamás nos hemos quejado ni estando gobernando el PP, ni el PSOE. Por motivos técnicos, la presión llegará cuando se acometan las infraestructuras necesarias en toda la ciudad, que tardará en llegar varios años, esa sí es la verdad, no confundan ustedes a los vecinos. No existe inseguridad ciudadana ya que vemos un policía local por cada calle, no existe crispación en la ciudad, claro hasta que no ganaron no se acabaron todas las falacias que ustedes han dicho durante la última legislatura. Ya tenemos una ciudad amable, encantadora, progresista e industrializada; cientos de profesionales industriales podrán comprar al ayuntamiento naves a 60.000 euros, la Junta pagará al ayuntamiento la deuda de 1.800.000 euros en varios plazos que deben desde hace varios años. ¿Cuánto tiempo se tardará en pagar los varios miles de millones de las antiguas pesetas de la compra del complejo de Hernán Cortés y la ciudad deportiva?, aunque primero la Junta debe hacerse cargo de la deuda, no lo sé. Lo que sí sé es que las obras están paralizadas como otros muchos proyectos a nivel nacional.

Lo que sí hizo este equipo de gobierno con muchísima celeridad es pagar los favores de los cuatro policías sindicalistas y de los cuatro presidentes de las cuatro barriadas que están todos bien colocados. No hablan tampoco de los dos mil setecientos euros de los nuevos consejeros que están puestos por ley, según real decreto, pero antes esta ley con el anterior gobierno no existía. ¡Madre mía!

Manuel Balastegui Ortiz **

Exconsejero municipal de Mérida