Osama bin Laden (Arabia Saudí, 1957) figura desde 1999 en la lista de los 10 criminales más buscados por el FBI. Antes, en 1994, su país le retiró la nacionalidad y desde hace décadas vive refugiado en Afganistán; ahora, al parecer, en lugares casi inaccesibles de las montañas.

Fundador en 1988 de la organización Al Qaeda muchos y terribles son los crímenes que Bin Laden ha instigado --los del 11-S en Nueva York y los del 11-M en Madrid como masivos--, aunque él y sus partidarios los consideran sólo necesarias respuestas a EEUU y a las naciones occidentales que dañan a los árabes. Una óptica que conduce a razonamientos que parten del terrorismo para ofrecer treguas como la del mensaje que acaba de difundir.

Osama bin Laden, perteneciente a una familia multimillonaria, demostró brillantes cualidades cuando estudió Religión y Ciencias Económicas. Fue apoyado en un principio por los servicios secretos norteamericanos. En 1979, tras la invasión soviética de Afganistán, luchó contra Moscú y organizó el reclutamiento de miles de voluntarios musulmanes. Luego, enemigo visceral de EEUU y la ONU, promovió la escalada terrorista que ya se conoce y se sufre. Quizá loco, y demagogo seguro, consigue la notoriedad porque nadie logra frenarle.

JOSE M. CADENA