El merchero más famoso de España es sin duda El Lute , que dio a conocer a este grupo social formado "por payos, pero con las costumbres que tenían antiguamente los payos, es decir, que la mujer se queda en casa y el hombre trabaja, la mujer llega virgen al matrimonio, etcétera". Lo cuenta Sofía Regis Benito, una merchera de 18 años que se sale del estereotipo porque se ha convertido en la primera merchera, además mujer, que estudia una carrera universitaria.

Ella misma ha decidido contar su historia para "abrir puertas a otros", para que otros jóvenes mercheros se animen a seguir estudiando, porque ella tiene claro que el estudio, el conocimiento "te abre la mente, no solo como persona sino también culturalmente".

Sofía explica que lo normal en su grupo social es estudiar hasta los 16 años, "después, los jóvenes dejan los estudios para buscar trabajo". Y entre las mujeres, muchas trabajan, como su madre y su hermana mayor, pero otras optan por ser únicamente amas de casa. Ella subraya que también lo es, pero que a su edad, lo habitual sería "que me casara y tuviera hijos".

Pero ella tenía claro que quería seguir estudiando y así se lo dijo a sus padres. Quería estudiar el Grado de Física y la localidad más cercana para hacerlo es Badajoz, pero sus padres no querían que se marchara de casa y al final, terminó por matricularse en Física, pero en la UNED. "Los profesores del instituto hablaron con mi madre para que me dejara irme fuera a estudiar, pero no pudo ser".

Sofía ha estudiado la Educación Secundaria Obligatoria y el Bachillerato en el IES Gabriel y Galán y señala que ha sido una buena estudiante porque siempre le ha gustado estudiar.

Afirma que sus padres están "orgullosos de que yo sea la primera merchera universitaria", al igual que sus hermanos --tiene también otros dos hermanos pequeños, mellizos-- y sus amigos, pero explica que nadie de su entorno quiere seguir sus pasos. "Ellos lo ven bien por mí, pero no les gusta estudiar, no quieren seguir". Además, señala que "lo normal es que los niños pequeños sigan la costumbre de los mayores".

Ella no lo ha hecho y, por eso, se considera una persona valiente. También afirma que el resto de sus familiares y amigos no ven el estudio como un esfuerzo, "piensan que no supone ningún esfuerzo". Pero lo es, y más cuando se estudia por la UNED porque solo tiene un día a la semana de tutorías y el resto debe prepararlo y estudiarlo por su cuenta. Esto supone un esfuerzo adicional en cualquier estudiante, pero Sofía ya ha demostrado que no le da miedo el esfuerzo, ni superar barreras.

Por eso, reconoce estar muy contenta con su faceta universitaria y que ha comenzado el curso "muy bien", aunque también señala que debe estudiar "mucho contenido". No obstante, tenía claro que quería estudiar Física porque "me gusta mucho la ciencia, siempre me han gustado las matemáticas".

Ahora empieza su nueva etapa, con su ilusión por delante y el apoyo de los suyos, aunque no vayan a seguir sus pasos. Su intención es esforzarse para ir aprobando año a año para, al final, salir de Plasencia y dedicarse a dar clases. "Me gustaría tirar por el tema docente", dice, y no duda de que llegará a hacerlo, al igual que un día decidió no mantener la tradición y las costumbres y ser merchera y universitaria.