El Ayuntamiento de Plasencia aprobó ayer la petición al Ministerio de Hacienda de 24,1 millones de euros. Dos créditos a cambio de un plan de ajuste para poder pagar a los dueños de las huertas de La Isla y ejecutar así unas sentencias que suponen una deuda de 40 millones. La aprobación de la petición de este rescate salió adelante con los votos a favor del PP y la abstención de PSOE y Extremeños.

Ayer cumplía el plazo de solicitud de uno de estos créditos, los Fondos de Ordenación, de ahí el adelanto del pleno --que se celebró en el Salón Noble al estar reformándose el de plenos-- y suponen, junto con los de Impulso Económico, la única salida que le queda al ayuntamiento para llegar a un acuerdo con unos propietarios que siguen insistiendo en que solo quieren el pago en metálico. Así al menos lo manifestó ayer el concejal de Hacienda, José Antonio Hernández. "No nos queda otra oportunidad, otra manera de pagar que esta fórmula, porque no podemos pedir créditos ni tenemos fondos propios".

El edil subrayó que "solo el pago de las sentencias nos lleva a esto" y recordó que el gobierno municipal también ha puesto sobre la mesa de la negociación el nuevo plan general y la quita de intereses. También recordó que, si no hubiera acuerdo, el juez establecería un calendario de pagos desde el 2017 al 2023 porque ya en 2016 está obligado a pagar 3 millones de euros.

Hernández hizo hincapié también en que su intención es "que afecte mínimamente al ciudadano" y es fruto de "años de erróneas decisiones".

José Luis Díaz, portavoz de Extremeños y durante 8 años alcalde del PP, recordó que el conflicto data de 1985, con lo que "es un problema heredado". Defendió la expropiación de entonces "para que no se construyera en las huertas" y calificó la petición de rescate como "la única solución. A nadie le gusta tener que hacer esto pero, responsablemente, cualquiera que gobernara ahora lo tendría que hacer igual". Por eso, dijo: "Comprendo la postura del gobierno" y pidió "trascender la lucha partidaria. Hay que ser responsables y tener lealtad institucional".

Díaz se abstuvo en la votación y también el PSOE, cuya segunda portavoz, Nuria López, --David Núñez no pudo asistir al pleno-- criticó no obstante la medida porque supondrá "un endeudamiento que creemos que no va a soportar la ciudad, ajustes que van a afectar tanto a niños como a mayores". Pidió que en la fiscalización, sean las rentas más altas las que más paguen; que en las contrataciones se prime a las empresas locales y preguntó en dos ocasiones al gobierno municipal si está seguro de que el ayuntamiento va a poder devolver el rescate , 1,5 millones en el 2017 y 3 millones anuales desde el 2018 hasta el vencimiento.