Alrededor de treinta y cinco agentes de la Guardia Civil, alumnos y profesores, pertenecientes a la Escuela de Tráfico de Mérida, se desplazaron hasta Monesterio para participar en los actos organizados por el colegio de Infantil y Primaria El Llano, dentro de las acciones de educación vial que este centro educativo desarrolla anualmente.

Antonio Calderón, director de El Llano, explicó que la escuela «es mucho más que la educación reglada», con lo que acciones como esta «son parte de una formación integral, ante una sociedad cada vez más exigente con la ciudadanía, que pide respuestas a la escuela sobre los problemas reales de la vida». En esta edición se contó con la colaboración de la Policía Local y la ampa.

Atendiendo a la invitación del colegio y aprovechando una de las salidas de formación de los alumnos de la Escuela de Tráfico, los efectivos de la Guardia Civil participaron en una jornada de concienciación sobre seguridad vial. Compartieron desayuno con maestros y niños, para posteriormente participar en una charla en la que se incidió en la importancia de respetar las normas de circulación para garantizar una vida sin accidentes. El momento más esperado llegó al finalizar esta jornada de convivencia, cuando fueron invitados a subir a las motos de la Guardia Civil. Un sueño cumplido para muchos menores, que se convirtieron en agentes de tráfico por un día.