El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Zafra (Badajoz) tramita la declaración de ausencia de Manuela Chavero, la vecina de Monesterio desaparecida el 5 de julio de 2016, según publica hoy el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Esta publicación es uno de los pasos previos exigidos para que la autoridad judicial decrete, si procede, la declaración legal de ausencia.

La solicitud de esta declaración, que tiene por objeto la posibilidad de adoptar medidas dirigidas a proteger tanto los derechos como los bienes de la persona desaparecida, puede ser presentada por los familiares o por el Ministerio Fiscal, como así ha ocurrido en el caso de la desaparición de la vecina de Monesterio.

Según el Código Civil, se considerará en situación de ausencia legal -en uno de los casos- a la persona desaparecida de su domicilio o de su última residencia, si pasado un año desde las últimas noticias o la falta desde su desaparición, si no hubiese dejado apoderado con facultades de administración de todos sus bienes.

Manuela Chavero desapareció en la madrugada del 4 al 5 de julio de 2016, después de que estuviera con una amiga, la última persona que la vio, y después regresara a su casa.

Al día siguiente, en su domicilio nada estaba forzado, sobre su cama estaban los pantalones que había llevado el día anterior, la luz del salón y de la cocina estaban encendidas, al igual que la televisión, y su cartera y su teléfono móvil estaban allí, con una última conexión a las 01:55 horas del 5 de julio.

Desde entonces, nada se ha sabido o poco ha trascendido de la investigación oficial de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, ni han dado resultado las batidas llevadas a cabo, algunas organizadas por la Fundación QSD Global Europea, que preside el periodista Paco Lobatón.

Tampoco arrojó nada el rastreo que hizo el Grupo de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil de Badajoz y Sevilla en el pantano de Tentudía, con el apoyo de un robot submarino.

En estos meses incluso se ha tomado declaración a una persona en calidad de investigada, que quedó en libertad sin ninguna medida cautelar, y la Guardia Civil intervino tres vehículos a vecinos del municipio para analizarlos.