En la última reunión de la Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) se puso de manifiesto la necesidad de redoblar esfuerzos para lograr un consumo de agua más sostenible. Sus miembros conocieron los indicadores del Plan Especial de Sequía, que a fecha 1 de noviembre indicaba que seis embalses se encuentran en emergencia, entre ellos, el pantano de Tentudía, del que se abastecen nueve municipios.

En declaraciones a la emisora municipal Radio Monesterio, José Martínez, presidente de la CHG, explicó que esta situación implica que «hay que ser muy precavidos con este recurso y se debe estar «muy atentos», teniendo en cuenta que se desconoce cómo evolucionará la pluviometría en los próximos meses. Aunque aún no se contemplan restricciones para el consumo, el presidente sostiene que habría que plantearse una «disminución de las dotaciones», que podría rondar el «10% sobre la normal».

En este contexto, y dentro de las acciones de la mancomunidad de Tentudía para buscar soluciones a los problemas de abastecimiento, su presidenta y alcaldesa de Calera de León, Mercedes Díaz, ha solicitado una reunión con el presidente de la CHG. El embalse de Tentudía, de solo cinco hectómetros cúbicos de capacidad, acumula en la actualidad algo más de dos hectómetros, situándose por debajo del 43% de su capacidad, 16 puntos menos que el pasado año. Con la intención de prolongar al máximo el aprovechamiento de sus recursos, actualmente la mancomunidad comparte el suministro de la presa con los recursos hídricos que se extraen de los pozos de sondeo que se realizaron en su día, como medida de urgencia ante largos periodos de sequía.

Díaz señaló que se quieren reactivar antiguas reivindicaciones, como la construcción de una nueva presa o la interconexión del pantano con otros de mayor capacidad. Desde la CHG, según su presidente, son «conscientes» de esta situación. Martínez, explicó que dentro del Plan Hidrológico de la Demarcación del Guadiana se contempla esta posibilidad, siendo la «opción más factible», la construcción de un nuevo embalse, próximo al actual. Ya se han hecho estudios en este sentido.Uno de los escollos que presenta la construcción de este nuevo pantano, además de la financiación, es la actual protección ambiental de la cuenca del río Ardila, con lo cual, habría que hacer una «importante» tramitación ambiental y justificar ante la UE la «necesidad imperiosa» de construirla.