Alrededor de doscientas personas, entre las que se encontraban unos ochenta industriales del centro del pueblo, que permanecieron con sus negocios cerrados, se manifestaron ayer por espacio de una hora en la Plaza Mayor para pedir al equipo de gobierno municipal que traslade de nuevo el mercadillo de los jueves a su ubicación anterior, en la calle Mérida y aledañas.

Entre las consignas que corearon los manifestantes, acompañadas de una sonora pitada, la más repetida fue: "el mercado en el centro, para que el pueblo no esté muerto". En una de las pancartas podía leerse que "los jueves Jaraíz está muerto".

Por su parte un portavoz de los manifestantes valoró la protesta de forma muy positiva, "porque estamos aquí entre setenta y ochenta industriales, una cifra muy considerable para que nos tengan en cuenta".

Por otro lado el alcalde, José Agustín Tovar, declaró previamente a este diario que se ha reunido con los representantes de los industriales, "y estamos estudiando sus propuestas, lo que ocurre es que es un tema complicado y difícil". Al mismo tiempo se mostró abierto al diálogo y adelantó que mantendrá encuentros con los vecinos y los vendedores ambulantes.

La protesta concluyó en la Plaza de Santa Ana.