El ayuntamiento está decapando la piscina municipal para adaptarla a la normativa, mejorar su revestimiento y reducir la profundidad de la misma, con el fin de ahorrar agua y cloro. Además, contará con un elevador para facilitar el baño a personas con discapacidad y una sala de lactancia para colaborar en el cuidado de los niños. La alcaldesa, María Isabel Villa, explicó que las obras están siendo realizadas con previsión "para que esté lista el próximo verano, con cambio de césped y mejora en todas las instalaciones".

Por último, finalizado el contrato con el actual arrendatario, el ayuntamiento sacará a subasta el arrendamiento de la cafetería-restaurante y las terrazas de la piscina municipal

Por otro lado, el consistorio está realizando con fondos propios la finalización de la calle Las Cruces, obra ya terminada, y la conexión con las calles Consuelo y Cerquilla, "que han requerido una gran inversión, ya que, hacía más de 30 años que no se realizaba una actuación completa, y su estado era lamentable", según indicó el concejal Juan Manuel Alberca.

El edil añadió en declaraciones a este diario que se trata de una obra "complicada", que está suponiendo "un gran esfuerzo" para el consistorio y molestias para los vecinos. Alberca adelantó que "esta semana podrá ser hormigonada la zona levantada y continuar con los dos trozos que faltan".