Alrededor de cinco mil personas presenciaron ayer en Jarandilla de la Vera una recreación de más de treinta oficios antiguos --incluyendo tabernas y escuela-- que llenaron, bajo la denominación de Una mirada al pasado. Los antiguos oficios de 1900 a 1950 , las calles y plazas del casco antiguo, según los datos que manejaba durante el recorrido por la localidad el alcalde, Victor Soria.
Muchos turistas y habitantes de otras localidades cercanas se desplazaron a lo largo de la mañana hasta Jarandilla para contemplar el trabajo de alfareros, queseros, herreros, carniceros y lavanderas, cuyos oficios fueron rescatados del baúl de los recuerdos gracias a la colaboración de vecinos y colectivos sociales.
Las labores del campo también estuvieron representadas con la trilla, las despezonadoras de pimiento para pimentón, las capadoras de higos y las colgadoras de tabaco.
La nota musical la puso el grupo folclórico local Virgen de Sopetrán, a través de una ronda mañanera por las calles típicas jarandillanas, mientras tenían lugar diversas representaciones itinerantes, entre las que había serenos, aguadoras, hojalateras y silleteros, segadoras, aldeanas, limpiabotas, mujeres vestidas de domingo para asistir a misa en 1920, soldados y chicas de servicio.
Conservar la tradición
Los objetivos de la cita, según desveló el alcalde, son varios, ya que se trata de conservar la cultura tradicional, haciendo un reconocimiento público a las personas mayores a través de los oficios antiguos, servir de prólogo a la feria multisectorial, que se celebrará del 9 al 12 de agosto, ambos inclusive, "aunque con esta última de lo que se trata es de potenciar a los empresarios y artesanos actuales, sin olvidar que estamos en unas fechas en las que contamos con muchos visitantes".
Con la llegada de la tarde fue desapareciendo de las calles jarandillanas toda la retahíla de trabajos de épocas pasadas que a lo largo de la mañana entretuvieron a lugareños y turistas, mientras el cielo amenazaba con descargar un fuerte aguacero tormentoso, que en principio se quedó en unas pocas gotas de lluvia.
