La Junta de Extremadura ha dado el visto bueno a la firma de un convenio de colaboración entre la Consejería de Infraestructuras y Desarrollo Tecnológico y la Denominación de Origen Protegida Cereza del Jerte, que ampara al 90% de la exportación de cerezas y picotas del Norte de Extremadura, para mejorar la rentabilidad y competitividad de estos cultivos, que suponen actualmente el principal soporte de la economía local de los once municipios que configuran la comarca jerteña.
El citado convenio permitirá la inversión, hasta el año 2009, de un mínimo de 121.381,33 euros, financiados en un porcentaje del 75% a través de fondos procedentes del Feder, con los que se tratarán de solventar los principales problemas tecnológicos que presenta en estos momentos el cultivo de cerezas en la comarca del Valle del Jerte, para mejorar su producción.
Entre los inconvenientes señalados que pesan especialmente sobre el sector destacan el predominio de variedades tradicionales carentes de selección --lo que dificulta la posterior labor de comercialización del producto--, pero también la utilización de material vegetal deficiente y generalmente con un mal estado sanitario, y la plantación casi exclusiva del patrón denominado reboldo autóctono de la comarca sobre el que es necesario continuar con la selección clonal y sanitaria, ya iniciada en la zona del Jerte hace algunos años.
ARBOLES VIEJOS Por otra parte, la existencia en las explotaciones de cerezas de árboles viejos de gran tamaño, que dificultan y encarecen la recolección y la aplicación de nuevas técnicas de cultivo; así como la insuficiencia de conocimientos sobre los diversos problemas fitopatológicos, que permitan una mejor protección vegetal, son otros de los problemas que aquejan al sector de la cereza y que pretenden atajarse, o por lo menos aminorase de momento, con el acuerdo alcanzado entre la Consejería de Infraestructuras y Desarrollo Tecnológico y la Denominación de Origen Protegida Cereza del Jerte.
