La Consejería de Educación y Cultura trabajará para mantener con vida Granadilla tras el anuncio del Ministerio de Educación de suspender las becas para la recuperación y uso educativo del antiguo poblado, abandonado en 1964 por las obras del pantano de Gabriel y Galán.

El departamento que dirige la consejera Trinidad Nogales anunció ayer que tiene previsto reunirse con responsables del ministerio para tratar de buscar soluciones a esta situación. Educación dejó claro que "ya está trabajando en la búsqueda de alternativas dentro de su ámbito competencial para poner en valor" Granadilla.

No obstante, destacó que esta consejería "gestiona este programa por encargo del Ministerio de Educación, pero que la decisión que finalmente se adopte sobre este enclave supera las competencias de la propia consejería ya que Granadilla es propiedad del Organismo Autónomo Parques Nacionales".

En este sentido, la consejería recordó que el Programa de Recuperación y Utilización Educativa de Pueblos Abandonados es una iniciativa del Ministerio de Educación que también implica a los de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y al de Fomento. Se trata de un programa de cooperación territorial que afecta a tres núcleos en el territorio nacional como son Búbal (Huesca), Umbralejo (Guadalajara) y Granadilla, añadieron desde el departamento del Gobierno de Extremadura.

Según avanzó este diario la semana pasada, la decisión de eliminar esta convocatoria se debe a los ajustes presupuestarios y la consecuencia es que, por segunda vez en medio siglo, Granadilla pierde a sus moradores.

Además de los turistas, los alumnos eran los que daban contenido al pueblo y lo habitaban en estancias en turnos semanales o quincenales. El perfil estaba en una franja de edad entre los 14 y los 20 años. Entre los criterios de selección se priorizaban a los centros escolares en zonas industriales, los ubicados en localidades de menos de 5.000 habitantes y los centros con un porcentaje elevado de minorías étnicas y culturales.