El club taurino trujillano ha perdido a uno de sus impulsores desde los inicios. Antonio Bravo Fernández, nombrado presidente el pasado 6 de febrero de este año, en sustitución de Luis Pino, falleció el pasado martes, a los 80 años. Ayer miércoles fue celebrado el funeral en la iglesia de San Francisco de Trujillo, con presencia de familiares, amigos y numerosos aficionados del sector taurino.

Hasta su nombramiento como presidente del club, Bravo ejercía de vicepresidente, un cargo que dejó tras su nuevo nombramiento, decidido en la asamblea general de socios celebrada en el teatro Gabriel y Galán, hace algo más de dos meses.

La nueva junta directiva del club taurino se complementó con Belén Muriel, Antonio Suero, Antonio Murillo, Manuel Valle y Carlos Retamosa.