El Obispado de Coria-Cáceres ha derivado cualquier responsabilidad sobre la construcción ilegal de un velatorio en el antiguo seminario hacia Alcaesar Funercoria SL, la empresa que ha alquilado las dependencias donde se realiza la obra. EL PERIODICO EXTREMADURA publicó el pasado 1 de octubre que el obispado inició la construcción de un velatorio sin la pertinente licencia de obras.

El delegado diocesano de Medios de Comunicación, Jesús Moreno Ramos, reconoció a través de un comunicado que se ha arrendado la parte baja del antiguo seminario a la empresa Alcaesar Funercoria SL para la instalación de un velatorio. No obstante, el comunicado precisa que ambas partes suscribieron un contrato que establece que debería ser "el arrendatario el que se encargase se pedir las licencias y permisos pertinentes".

Sin embargo, la documentación que obra en poder de este diario revela el intercambio de escritos entre el Ayuntamiento de Coria y el obispado a través del deán del Cabildo de la Catedral de Coria, José Antonio Fuentes, a quien se le comunicó el pasado 26 de julio que con la ley en la mano y con las normas subsidiarias no puede concederse la licencia. Dos meses antes, el 25 de mayo, había intentado obtener la licencia, sin éxito, Juan José López Vivas, en representación de la empresa Alcaesar Funercoria SL. La solicitud pretendía que la construcción fuese considerada como obra menor y el documento donde se recogía la memoria valorada se presentó sin detallar la obra ni su coste.

El ayuntamiento se dirigió a la empresa funeraria el 9 de agosto con un escrito redactado en los mismos términos que el que se envió el 26 de julio al deán del Cabildo de la Catedral de Coria: no existía posibilidad de conceder la licencia urbanística, entre otras cuestiones porque el edificio "se encuentra en suelo no urbanizable y en zona de protección especial agrícola".

RESPONSABILIDAD Los técnicos dejaron claro que la situación del edificio sólo permite que se autoricen obras de conservación. Por si fuera poco, los técnicos recordaron que en el edificio funciona una residencia de ancianos sin licencia de apertura. Si el obispado derivó el domingo la responsabilidad de la construcción ilegal hacia la empresa funeraria, ayer, Juan José López, trasladó el debate al ayuntamiento por considerar que es "una cuestión municipal". López no se pronunció al ser preguntado por la supuesta ilegalidad.

Por otro lado, María del Carmen Rivera, propietaria del único tanatorio abierto en Coria, presentó el 16 de septiembre en el ayuntamiento tres escritos dirigidos al alcalde, el arquitecto municipal y la policía local denunciando la ilegalidad de las obras "por si fueran constitutivas de infracción administrativa". La demandante ha pedido una investigación municipal para que se cumpla la "legalidad urbanística".