La Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) estudia en estos momentos las ofertas presentadas para la redacción del proyecto de la presa de Monteagudo, en la provincia de Toledo, que en su día servirá para potenciar los regadíos de ambas márgenes del río Tiétar, en lo que concierne a las comarcas cacereñas de La Vera y el Campo Arañuelo, según ha señalado en declaraciones a EL PERIODICO el presidente de la CHT, José Antonio Llanos, quien recientemente visitó la zona.
En este sentido, Llanos explicó que "si no ocurre nada extraño, este mes conoceremos al adjudicatario del proyecto". A partir de ahí, la confederación "espera encontrar una solución" que permita zanjar los problemas derivados tanto de las inundaciones como de las sequías, al tiempo que contribuiría a evitar "que tenga un impacto ambiental inviable".
NECESIDAD DE LA PRESA
La necesidad de construir una presa en Monteagudo viene dada, según Llanos, porque el río Tiétar tiene todos los años unas aportaciones medias de agua importantes, pero con "un curso muy mal regulado".
Prueba de ello es que la aportación media que hace es de "más de 1.000 hectómetros cúbicos, y la única presa que hay en su cauce es la de Rosarito, que tiene 84 hectómetros". Esto indica que se regula menos del 10% del caudal total, lo que provoca inundaciones en El Campo Arañuelo y La Vera, con los consiguientes daños en cultivos y edificaciones.
Por último, el responsable de la confederación reiteró que Monteagudo paliará el problema que surge cada año con las inundaciones y de la escasez de agua para riego, que "para nosotros es fundamental".
