Esta localidad está situada entre los ríos Almonte y Tajo, es famosa por sus estelas prerromanas decoradas y por ser una de las principales puertas al Parque Natural de Monfragüe; entrando en el mismo, saludan al visitante los restos de un castillo de origen árabe y, al pie de dicha elevación, una de las múltiples cuevas con pinturas esquemáticas rupestres, que demuestra la importancia histórica de este paraje tan privilegiado donde existen especies únicas en Extremadura y en la Península. Se corresponde este municipio con una zona de penillanura pizarrosa con resaltes de cuarcita, la Cañada Real Trujillana que cruza la población. Se trata en su mayoría de áreas serranas de bosque mediterráneo casi virgen, al sur del parque de Monfragüe.

En la plaza de la localidad se levanta la iglesia parroquial de San Miguel Arcángel, el edificio más importante de la población; es el templo de Torrejón el Rubio. En la misma plaza se sitúa una construcción del siglo XVI. El Cuartel Viejo, antiguamente propiedad de los Condes de Torrejón donde hoy se ubican la casa de cultura y el hogar del pensionista. En el término municipal y en privilegiado emplazamiento estratégico, en pleno Parque de Monfragüe, se encuentra el castillo cuyos orígenes hay que relacionar con el recinto fortificado que existía en el lugar desde la Edad del Bronce, el cual sería habilitado durante la dominación romana.

Durante la ocupación musulmana cumpliría un papel decisivo en la vigilancia de la frontera cristiano-musulmana que fue el Tajo. Al siglo XII, cuando el edificio pasó a pertenecer a la Orden de Montegaudio, pertenecen los restos del torreón circular que aún puede verse.

El castillo alberga la ermita de Nuestra Señora de Monfragüe, en cuyo interior se venera la imagen de la titular, patrona de Torrejón el Rubio, talla del XIII y que representa a la Virgen con el Niño en posición sedente. El Parque Natural de Monfragüe, fue el primer espacio natural protegido en Extremadura. Las sierras que delimitan este valle, que apenas alcanzan los 800 m. de altitud, acogen a una importante variedad de biotopos: encinares, bosque y matorral mediterráneo, roquedos, embalses y arroyos, permitiendo la existencia de una rica y variada vida vegetal y animal.

El parque es compartido por siete municipios entre los que se encuentra Torrejón.

Otro aspecto destacado es la diversidad de actividades de educación ambiental que el visitante encuentra: rutas, intercambios, organización de jornadas medio-ambientales, congresos de formación ambiental e información general sobre conservación de la naturaleza. Destaca su repostería popular: los bollos de chicharrones, los buñuelos y las floretas.