Cornetas y tambores ya resuenan en las calles de la capital autonómica. La Sagrada Cena y la Cofradía Infantil inauguraron ayer la Semana Santa con más aspiración internacional para Mérida. Con un sol de justicia primaveral y cientos de fieles en la calle, la Pasión emeritense volvió a brillar en un Domingo de Ramos multitudinario que recupera todo su esplendor tras verse el año pasado deslucido por la lluvia.

Pasadas las cinco de la tarde los 45 costaleros de la Cofradía de la Sagrada Cena y Nuestra Señora del Patrocinio sacaban de la parroquia de San José al magestuoso paso del imaginero sevillano Juan Antonio Blanco Ramos. Salía tras la petición de La Venia, por la que el hermano mayor, Pablo Burgos, llama en tres ocasiones a la puerta para solicitar la presencia de las imágenes.

Ya en la calle, la primera levantá la pronunció el vicepresidente de la Cofradía del Cristo de la Clemencia de Hellín, Eloy Jiménez (entrenador del Mérida), cofradía con la que los costaleros de la barriada de La Argentina se hermanarán próximamente. Minutos después que la Sagrada Cena iniciaban su estación de penitencia las 35 costaleras de Nuestra Señora del Patrocinio. El paso estrenaba la parihuela y la peana de la Virgen, que emocionó y deslumbró a partes iguales cubierta con su manto rojo y adornada con lirios y claveles blancos.

Y mientras la Sagrada Cena enfilaba la recta del Teatro Romano para alcanzar la carrera oficial desde la espectacular bajada de la calle José Ramón Mélida, de la concatedral de Santa María partía la Cofradía Infantil con el paso de la Entrada de Jesús en Jerusalén, popularmente conocido como ‘La Burrita’. Aclamada por cientos de fieles, salió como cada año escoltada por sus 400 nazarenos. Uno de los puntos álgidos del desfile fue el paso de la imagen de Pío Molear por el Arco de Trajano, que el año pasado no pudo realizarse por la lluvia.

La Cofradía Infantil también procesionará hoy con los pasos de Jesús de Medinaceli, el Cristo de las Injurias y Nuestra Señora del Rosario, desfile que arrancará a las 20.30 de la concatedral.