De flautista de conservatorio en Don Benito a licenciado y máster en flauta jazz en La Haya (Holanda), donde trabaja como músico freelance y colabora con diversos grupos. Con uno de ellos --Projekt Z -- ha vuelto Rodrigo Parejo, dombenitense de 29 años, estos días a Extremadura para ofrecer tres conciertos. Tras pasar por Almendralejo, el jueves, y su ciudad natal, ayer, hoy será el turno de Mérida. A partir de las 22.00 horas en el bar La Tahona.

¿A qué suena Projekt Z ? "Tocamos música experimental, mezclando un poco el jazz, la música clásica, punk, minimalista... Es un proyecto muy creativo", intenta explicar Rodrigo, a quien le cuesta mucho menos transmitir su arte armado con su flauta travesera. Con ella lleva conviviendo, de forma ininterrumpida, desde los ocho años, cuando entró en la Banda Municipal de Don Benito.

"Es algo un poco típico en esta ciudad", comenta. "Al menos, antes a muchos nos apuntaban nuestros padres, cuando éramos pequeños, a la banda, Los Caramanchos (un grupo folclórico)" o el conservatorio". De hecho, él pasó también por allí, trasladándose después al de Mérida y luego a Madrid, donde ya comenzó a seguir clases de "jazz improvisación". Por aquel entonces, comenzaban a ser habituales sus colaboraciones con grupos extremeños como El gitano, la cabra y la trompeta .

Pero Rodrigo quería seguir aprendiendo y, por recomendación de especialistas de este ámbito, decidió probar suerte en La Haya, donde, según le dijeron, había muy buenas escuelas de música y bastante apoyo para las personas que se especializan en este área. De hecho, allí no suena raro eso de ser "licenciado y máster en flauta jazz", lo que, admite, aquí sí choca bastante. No obstante, su familia siempre han entendido su pasión por este instrumento y le ha apoyado plenamente en su trayectoria, con el único típico reproche de que viva tan lejos de casa y no la visite más, aunque suele pasar por Extremadura al menos una vez al año.

En esta ocasión, lo hace acompañado por Petr Zelenka (guitarrista y cabecilla del grupo) y Dano Soltis (batería); ambos proceden de Praga. Falta un cuarto componente, Marcel Barta (saxo y clarinete bajo), que procede de Eslovaquia y no ha podido acompañarles en este viaje, lo que en vez de lamentar aprovecharán para probar nuevos sonidos.

Precisamente, la capacidad de Rodrigo de innovar llevó a Petr a invitarle a su proyecto musical (ya han grabado dos discos y el extremeño participará en el tercero, en el que comenzarán a trabajar en septiembre). "Canta con la flauta, es muy especial", señala el checo, que solo tiene elogios tanto para su compañero --amable, agradable...--, como para su tierra, que está conociendo estos días y de la que destaca, cómo no, la comida, pero también la gente y la vida de noche. No en vano su grupo está amenizando algunas de ellas con su experimental música y un flaustista de Don Benito.