La nueva fiscal de sala para la violencia sobre la Mujer, Soledad Cazorla, aseguró ayer, en la toma de posesión, que estudiará las causas por las que algunas víctimas de malos tratos retiran las acusaciones. "Si un individuo delinque, hay actuaciones policiales, una investigación judicial donde el fiscal sigue esa intervención, se realiza una acusación y se lleva a juicio a un ciudadano y, al final, se retira la acusación, hay que explicar por qué", dijo.
Para Cazorla, que dirigirá a todos los fiscales en las causas de violencia contra las mujeres, aunque la víctima de maltrato se retracte, "seguramente" hay otras declaraciones con todas las garantías legales y pruebas objetivas, como un parte de lesiones, que
"corrobore la primera declaración de la mujer". Actualmente, muchos agresores son absueltos porque las víctimas retiran las denuncias o no se presentan en el juicio.
La nueva fiscal explicó que la ley integral contra la violencia de género era "una necesidad" no sólo por el aumento de víctimas, sino
"porque un Estado de Derecho no puede consentir que haya agresiones físicas, psíquicas o sexuales y se violen valores constitucionales".
El objetivo es, según explicó la fiscal, que la mujer maltratada "se vea amparada, no sea víctima de la sociedad y para eso tiene que encontrar una respuesta en el fiscal. ¿Cómo? Otorgando un amparo y una protección que se merece como víctima de tan deplorables hechos".
También recordó que la violencia de género es un tema prioritario para la Fiscalía General del Estado y para los fiscales que trabajan desde el 29 de junio en los más de 400 juzgados especializados.
