El Gobierno tiene prácticamente decidido que el Estado asuma la deuda de RTVE para adelantar e impulsar el plan marco para la viabilidad del Ente del periodo 2002-2004. El fin es adecuarse a las líneas marcadas por Bruselas para las televisiones públicas y que RTVE opere desde el equilibrio económico y financiero desde el 2005, dijeron fuentes de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI).

La deuda alcanzará al cierre del 2003 los 6.200 millones de euros (1,03 billones de pesetas), que se han generando de manera creciente desde principios de los 90 como consecuencia de la desaparición del régimen de monopolio cuando comenzaron a operar las televisiones privadas.

En 1990, RTVE pasó de ser administración a ser empresa pública y sus cuentas dejaron de computar en el déficit del Estado. Ahora, la deuda de RTVE tiene el aval del Estado y se beneficia de la mejor calificación que dan los mercados a la deuda pública española. En la SEPI consideran que si se incorporasen los números rojos de RTVE, la deuda del Estado aumentaría del 52% al 53% del PIB, muy lejos del 68% que se alcanzó en 1996.

LA IMPORTANCIA La asunción de esta deuda es un paso fundamental para impulsar de forma decidida el plan de viabilidad 2002-2004. Además, las fuentes consultadas consideran que así se resolverían las dudas que el comisario europeo de la Competencia, Mario Monti, dijo al Gobierno español sobre el aval sin límite que ofrece el Estado a RTVE. Además, la Oficina Estadística (Eurostat) ha puesto en duda la viabilidad de RTVE sin el apoyo del Estado, por lo que cree que la deuda de RTVE debe reflejarse en la deuda del Estado.

El Gobierno cree que esta medida debe adoptarse en el contexto del conjunto de actuaciones del plan marco para equilibrar los resultados anuales de la empresa. Las mismas fuentes dicen que sería un error afrontar el problema de manera aislada, porque RTVE seguiría generando déficits y a tener deudas.

POSIBLES DESPIDOS Además, se sabe que la SEPI intenta lograr los objetivos del plan de viabilidad aplicando medidas de reducción del gasto, mejora de los ingresos e introduciendo eficiencia en la gestión y para ello trabaja con la posibilidad de plantear un expediente de reducción de empleo, que se sumaría al del periodo 2001-2002 y al que se acogieron 300 empleados. El fin es conseguir el equilibrio financiero de RTVE en el 2005.