El fracaso escolar entre los alumnos de Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) en Extremadura fue en 2001 del 33,2%, ya que quienes acabaron estos estudios fueron el 66,8 %, según se desprende de los datos del Ministerio de Educación recogidos en el libro Qué será de nosotros, los malos alumnos , del catedrático y ex secretario de Estado de Educación, Alvaro Marchesi.

En la publicación también se señala que el gasto por alumno no universitario fue en la región de 2.944,06 euros, cuanto el Producto Interior Bruto (PIB) per cápita fue en Extremadura de 9.809 euros.

En el informe también se constata, dentro del contexto general del país, que las mujeres fracasan menos en los estudios. Así, Marchesi revela que el 82,6% de las alumnas obtienen el graduado en secundaria obligatoria frente a sólo el 67% de los varones. Los porcentajes son similares en todas las comunidades, por lo que no influye ni la renta per cápita ni el nivel de estudios de los padres ni el gasto por alumno.

El estudio advierte de que los conocimientos de ambos sexos en términos globales, de acuerdo con las evaluaciones externas, son similares. Mientras que las alumnas son mejores en comprensión lectora y expresión comunicativa, los alumnos obtienen resultados superiores en matemáticas y ciencias.

Marchesi atribuyó este éxito a que "generalmente son más ordenadas y se esfuerzan más".