El juzgado de primera instancia nº 36 de Madrid impuso una tregua en la guerra que mantienen Sogecable y Mediapro por la explotación de la Liga de fútbol al dictar medidas cautelares en las que se fija la emisión en abierto de un solo partido de Liga a la semana, y el resto, en pago por visión, como ha venido sucediendo hasta la actual temporada y como había reclamado Audiovisual Sport (AVS), la empresa que gestiona los derechos de los encuentros de Liga y cuyo socio mayoritario es Sogecable (80%). Mediapro queda así obligada a cumplir hasta final de temporada el contrato que firmó con AVS el 24 de julio del 2006.

El elemento clave del auto es la aceptación provisional del contrato firmado en julio del 2006 entre AVS y Mediapro, que la primera de estas empresas ha exigido que se cumpla estrictamente y que la segunda ha pedido que se considere nulo, asunto de otra demanda judicial sobre la que aún no hay resolución. Analizando lo sucedido en la actual temporada liguera, la jueza que firma el auto considera que es "notorio que Mediapro al menos se excede de dicho acuerdo", lo que la lleva a decidir que "hasta que el pleito principal se resuelva" se impone la adopción de la medida cautelar, "que conlleva el mantenimiento del statu quo de antes del comienzo de la Liga". La resolución judicial "prohíbe" a Mediapro "cualquier acto de explotación de los derechos audiovisuales cedidos a AVS" durante la temporada 2007/2008.

Para poder responder "de manera rápida y efectiva, a los daños y perjuicios que la adopción de la medida cautelar pudiera causar al patrimonio del demandado", el auto exige a Audiovisual Sport un depósito o aval bancario de 50 millones de euros. A Mediapro se le impone que se haga cargo de las costas.

Pese a que aparentemente el auto judicial dejó ayer satisfechas a ambas partes del litigio, la interpretación que hicieron cada una de ellas de la resolución fue distinta. Un portavoz de Sogecable, socio mayoritario de Audiovisual Sport, matizó que para normalizar la situación es preciso que Mediapro "pague previamente los más de 70 millones de euros que les reclaman como consecuencia del acuerdo de julio del 2006", en el que se basa el auto judicial de ayer. "La próxima jornada, si Mediapro no ha pagado, no se les dará la señal", añadieron dichas fuentes. En Mediapro consideran que la resolución les permite disponer de los derechos que les confería el contrato que está en discusión sin tener que pagar nada.