Más allá del interés por el deporte o las cartas que tenga el jugador, las apuestas ganan puntos como forma de subsistir. Existe la figura del apostador profesional y los portales lo tienen claro: "Tenemos clientes profesionales que antes operaban en bolsa y ahora apuestan en internet", dicen desde Betfair.com. "La gente no está con nosotros porque ame el deporte. Lo que quiere es dinero". Arbwinner, una firma de arbitrajes, anuncia en su web que es más rentable apostar que abrir un fondo en un banco.