El descenso de la inflación favorecerá las arcas de la Seguridad Social, que destinará 863,79 millones de euros -mil millones menos que en 2005- a devolver a los pensionistas el poder adquisitivo perdido por el alza de los precios, pero también hará que las pensiones suban menos.

La cantidad total que dedicará el Ministerio de Trabajo a compensar a los pensionistas se ha calculado con la tasa de inflación de noviembre conocida hoy, que fue del 2,6%. Por ello, los pensionistas recibirán una paga extraordinaria con la compensación por la subida de precios de 60 euros de media, e irá desde los 11,76 euros en las pensiones de orfandad hasta los 70 euros en las de incapacidad permanente.

La mitad de los 863,70 millones de euros que destinará el Ministerio de Trabajo será para compensar a 8,5 millones de pensionistas (8,22 millones de pensiones contributivas y 466.716 no contributivas) por el desvío de la inflación, mientras que la otra mitad se destinará a la consolidación de este aumento en las nóminas de los pensionistas dados de alta como tales en diciembre de 2005.

El Ministerio de Trabajo destacó además que en los tres últimos años las pensiones mínimas contributivas de los mayores de 65 años han subido el 19,78% y las mínimas con cónyuge a cargo, el 24,99%.

Los dos principales sindicatos valoraron las subidas de las pensiones como un logro de la acción sindical. UGT destacó que gracias al diálogo social se han alcanzado acuerdos que permiten que muchas personas con bajos ingresos "no sufran" la pérdida de capacidad de compra por la subida de los precios, mientras que CCOO indicó que seguirá reivindicando la inclusión de las cláusulas de revisión salarial.