La tasa de paro entre los jóvenes extremeños (población de entre 18 y 34 años) se sitúa actualmente en el entorno del 19% según los últimos datos oficiales, muy por encima de la media nacional, que es del 12%. Así, de los 186.500 jóvenes de la comunidad autónoma que están en condiciones de incorporarse al mercado laboral, hay 36.000 que se encuentran en situación de desempleo. Además de la elevada tasa de paro, hay que tener en cuenta que entre los que trabajan más de la mitad de los contratos que tienen son temporales y muchos duran menos de un año.
Este problema a la hora de encontrar trabajo tiene una primera consecuencia: Que el 60% de los jóvenes no se emancipan de sus padres y sitúan como factor principal la precariedad laboral que sufren. Así lo explica el ´Informe 2005´ el Observatorio Joven de Vivienda en España, que revela que Extremadura tiene una baja de emancipación, inferior a la del conjunto del país, con un 39%. Esta ratio supera las de País Vasco, Castilla y León, Asturias, Galicia, Cantabria y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. El informe lo achaca a la alta tasa de paro y la excesiva temporalidad.
