Cada 21 de septiembre, Naciones Unidas conmemora el Día Internacional del Alzheimer, con el objetivo de “concienciar sobre esta enfermedad que afecta, no solo a los pacientes, sino también a los cuidadores directos y familiares”. Una enfermedad, que hasta el momento no tiene cura, pero sí terapias y actividades que pueden retrasar, e incluso prevenir el deterioro que causa en las personas esta enfermedad.

En este contexto, la emisora municipal, Radio Monesterio, ha incluido entre sus contenidos informativos del día, una entrevista con la terapeuta ocupacional, especialista en geriatría, Claudia Manzano Pérez, quien afirma que “la estimulación cognitiva puede prevenir y retrasar la aparición de los síntomas” de esta enfermedad.

Salud cerebral

"Habitualmente damos mucha importancia a la salud física, mediante la práctica deportiva; pero olvidamos la importancia de la práctica cerebral2, señala la especialista. El equilibrio, explica Claudia Manzano, pasa por “entrenar el cuerpo, y a la vez, entrenar las capacidades”.

En este contexto, la terapeuta “anima” a los mayores a realizar prácticas de “gimnasia cerebral”, con la que “normalizar el proceso de envejecimiento, a través de terapias de mantenimiento y fortalecimiento de la memoria. Se trata, de “activar el cerebro” para prevenir, o rehabilitar demencias. En el caso de la prevención, la profesional ofrece sesiones para trabajar todas las funciones cognitivas, con personas “sin deterioro”. Es decir, “ejercitar la memoria, potenciando las habilidades” y previniendo el deterioro asociado al paso de los años, “para que la vejez nos pille en plena forma”.

Las terapias de rehabilitación forman parte de tratamientos para pacientes “con deterioro cognitivo”, con las que ayudar a “disminuir y enlentecer” las capacidades cerebrales y físicas asociadas a esta enfermedad, y así “conseguir mejorar la calidad de vida”.

Cuidadores

Pero, no solo son fundamentales las terapias entre quienes padecen la enfermedad. La sobrecarga del cuidador, su situación emocional, o su propia situación física, “también hacen cesaría su participación en talleres grupales de apoyo, con el objetivo de ganar calidad de vida en el seno familiar”.

 “Tenemos que crear conciencia. Tenemos que entrenar la memoria. Es una inversión rentable para nuestra salud, frente a un futuro deterioro cognitivo”, concluye Claudia Manzano.