Los trabajadores de Eroski estudian la posibilidad de constituir una cooperativa para la gestión del hipermercado, el más antiguo de la capital cacereña con 14 años y una plantilla de 180 trabajadores, de los que 129 son fijos en la actualidad. La propuesta, que también se ha planteado en otras superficies españolas de la misma marca, cuenta el apoyo mayoritario de la plantilla, aunque los estatutos que regirían esa cooperativa aún están en fase de borrador.

Según avanzó ayer Manuel Morán, gerente de Eroski Cáceres, este proceso durará al menos un año y necesita del respaldo de la práctica totalidad de los trabajadores indefinidos, que tendrían que aportar una cantidad cercana a los 5.000 euros para formar parte de la cooperativa. De esta forma, explicó, se convertirían en "socios propietarios" y podrían participar en los dividendos de la empresa. Aunque este responsable prefirió ayer no ofrecer datos de facturación, afirmó que el momento para realizar el trasvase de sociedad anónima a cooperativa es el más idóneo por los beneficios y la estabilidad de la superficie de alimentación, con 7.500 metros cuadrados para la venta tras la última ampliación.

CONSULTAS En la actualidad, Eroski Cáceres está gestionada por los socios vascos de la cooperativa Eroski S. Coop., que seguirían participando en la nueva asociación. Los trabajadores interesados en integrarse en ella han recibido ya información sobre la situación laboral en la que quedarían (forma de cotización, período de vacaciones, etc.) En los próximos meses se presentarán los borradores de estatutos para que puedan introducir modificaciones. Este proceso no terminará antes del próximo verano, indicó Morán, que recalcó que los acuerdos se tomarán siempre tras consultar a los trabajadores. "No se va a forzar a nadie, porque el que no quiera formar parte de la cooperativa podrá seguir trabajando por cuenta ajena", subrayó. En cualquier caso, insistió en que hará falta "una amplía mayoría" para poder completar el proceso.

La implantación del sistema de cooperativa también pretende extenderse a otras líneas de negocio en la ciudad como supermercados (Eroski Center), aunque en este caso el proceso aún no se ha iniciado. En el híper cacereño 124 de los 129 trabajadores fijos ya forman parte de Gespa (Gestión de Participación), una fórmula semejante a una cooperativa, pero en la que los empleados no son propietarios de la empresa.

Morán añadió que con la puesta en marcha de una cooperativa los trabajadores podrían elegir a sus representantes en un consejo social, aunque el organigrama de funcionamiento seguiría siendo el mismo. La política de precios tampoco sufriría cambios ya que se mantendrían las directrices actuales, según el gerente.

Preguntado por la respuesta de la plantilla a esta fórmula, apuntó que "el 100% está de acuerdo en seguir adelante con el proceso" y añadió que "todos han visto muchas más ventajas que desventajas".