Para el director de la fundación Mercedes Calles y Carlos Ballestero, que abrió su sede hace cinco años en San Jorge, la revitalización del casco viejo pasa por "darle mayor contenido con el objetivo de que la visita turística dure más de dos o tres horas y utilizarla como gancho para obtener ingresos para la ciudad". En opinión de Luis Acha, "hay un vacío a partir de las tres de la tarde cuando cierran los organismos oficiales, que influye en el subconsciente del visitante y que parece que invita a marcharse pronto".

Considera que la parte antigua tiene futuro, siempre que haya inversiones, y cree que hay que potenciar más la marca de Cáceres como Patriminio de la Humanidad. "Soy optimista, pero hay que invertir", concluye.