Alzhéi-Cáceres busca fondos para adecuar un nuevo local que acogerá el Centro de la Memoria, que actualmente está ubicado en la calle Caupolicán, en la barriada de Moctezuma. El nuevo está situado en la calle Avila y necesita una reforma de más de 30.000 euros para adaptarlo a las necesidades de los enfermos. Para ello, el pasado mes de diciembre llevaron a cabo un concierto solidario a cargo del pianista Isidro Ortega y el grupo Isidro Duncan del Instituto de Educación Secundaria Hernández Pacheco y no descartan más actuaciones para lograr la cantidad necesaria.

El traslado al nuevo centro se hace urgente debido a que el actual se ha quedado pequeño para la demanda que poseen: Atienden a 35 personas pero tienen una lista de espera de otras 20. De hecho la cesión de este local ha sido una de las principales demandas del colectivo, que llegó a recoger 5.000 firmas en marzo para solicitarlo.

Las dimensiones limitan además la atención que se presta en este Club de la Memoria que funciona también como centro de día para enfermos afectados por distintos tipos de demencia y en el que se trabaja a través de distintas actividades (ejercicio físico, bailes, socialización, estimulación cognitiva...) en retener la memoria y las capacidades residuales que conservan los enfermos. Además, el tiempo que el enfermo permanece en estas instalaciones supone tiempo de respiro para los familiares, de ahí que se integre en un programa que se conoce como 'de respiro familiar'.

OBJETIVO El proyecto destinado a atender a enfermos de alzhéimer en una fase temprana, y también a descargar a los familiares que se ocupan de su cuidado, comenzó en el 2004 provisionalmente en Caupolicán. En teoría solo iban a estar allí seis meses pero la estancia se ha alargado en el tiempo. Pagan un alquiler de unos 500 euros. Tras años demandándolo, la Junta les ha cedido un nuevo espacio, sin embargo ahora necesitan fondos para hacer algunas reformas. La base está, puesto que fue acondicionado por la Junta para instalar las dependencias del Defensor del Discapacitado, pero requiere arreglos.

Alzhéi-Cáceres posee actualmente 220 socios y atiende a 16 personas con la ayuda a domicilio. Según explica la trabajadora social y coordinadora de centro, Marisa Hernández, los proyectos estrella son el apoyo psicológico, individual y grupal, tanto a enfermos como a cuidadores; y el centro de día. Además, se llevan a cabo intervenciones en municipios para divulgar en qué consiste la enfermedad.