Rafael Hernando García, párroco de Nuestra Señora de Guadalupe, en Cáceres, felleció ayer lunes, 21 de enero, a la edad de 55 años. Oriundo de Campastero en Valladolid, donde será enterrado, era miembro de la Congregación de los Hijos de María Inmaculada, más conocidos como pavonianos.

Desde la comunidad parroquial donde ha desempeñado su labor pastoral, explican que sus órganos han sido donados y que servirán para mejorar la vida de otras personas. Además, se celebrará esta tarde una oración de despedida a las 16.00 horas. La comunidad parroquial destaca, también, su pasión por la música, su entrega y cercanía y su labor con los jóvenes.