La Audiencia de Cáceres dicta un auto en el que desestima el sobreseimiento de la causa contra la exalcaldesa socialista de la capital cacereña, Carmen Heras, por el caso de las facturas del Festival Urban Screen.
Carmen Heras continúa por tanto como imputada en el caso de las facturas del Festival Urban Screen que instruye el Juzgado de Instrucción Número 4, por el que están también imputados los exconcejales socialistas Francisco Torres y Víctor Santiago Tabares, como firmantes de otras facturas.
La Audiencia de Cáceres desestima la petición de sobreseimiento con respecto a Carmen Heras al considerar que existen determinadas resoluciones sobre las que pesa "una duda razonable de que se encuentren acomodadas a la legalidad vigente" y que las ha adoptado la apelante, por lo que es "evidente" citarla en calidad de imputada.
En este caso, el juzgado investiga el pago de una factura por importe de 47.782 euros, que habría incumplido la normativa que controla las actuaciones de las corporaciones locales a la hora de adjudicar contratos.
Con fecha de 10 de junio del 2011, el interventor municipal informó negativamente sobre cuatro facturas, tres de ellas por si hubiera existido un fraccionamiento del presupuesto del festival para adjudicar los trabajos de manera directa, y en el caso de la firmada por Carmen Heras, por superar la cantidad de 18.000 euros, excediendo el límite legal previsto para este tipo de contratos.
El 29 de febrero del 2012 el actual gobierno municipal del PP entregó la documentación al Consejo Consultivo de Extremadura y finalmente puso el caso en manos de la Fiscalía de Cáceres.
Tras la declaración de la exalcaldesa el 5 de abril, su abogado, Emilio Cortés pidió el sobreseimiento que ahora ha sido desestimado.
La Audiencia insiste en que el proceso se encuentra en su trámite inicial y que será la instrucción quien determine si existió ilegalidad en los hechos y la responsabilidad de los mismos.
No obstante, indica que los contratos objeto de investigación provenían de un solo contrato que "excedía el límite para ser contrato menor", y por lo tanto para poder ser adjudicado sin concurso público.
Además indica que el festival iba a ser asumido por el Consorcio Cáceres 2016 pero que una vez que el Ayuntamiento de Cáceres asume la realización del mismo "un primer contrato único se disgrega en varios".
Asimismo el auto habla de un cuarto contrato cuya cuantía de este servicio "excedía el máximo permitido para una contratación directa" y que la propia imputada "no ha podido determinar a qué servicio correspondía ese pago a pesar de que ella lo autorizó".
