El ayuntamiento ampliará los huertos de ocio y potenciará que su uso llegue a los más jóvenes. Así lo expuso el alcalde de Cáceres, Luis Salaya, en su visita a las instalaciones que gestiona la Universidad Popular. Lo hizo acompañado de la concejala María José Pulido y ambos recorrieron la casa de labranza y las parcelas de los hortelanos.

En declaraciones a los medios el regidor municipal incidió en el interés del gobierno local en dinamizar el espacio y ampliar la superficie para revitalizar la Ribera del Marco. Salaya aprovechó también para aplaudir la labor «excepcional» de los trabajadores y los hortelanos «para mantener viva una tradición de la ciudad» e hizo referencia a que proyectos como este permiten que Cáceres «siga teniendo contacto con la naturaleza y con los usos y las explotaciones tradicionales». «Las ciudades del futuro se parecerán en algunos usos a las del pasado, y si queremos ser más sostenibles tenemos que acercarnos a todas estas actividades», concluyó.

Este proyecto de revitalización de las huertas municipales se encuentra enmarcado en el plan municipal para recuperar la Ribera del Marco, uno de los ejes en los que pretende basar Salaya su legislatura. El cauce llevaba décadas abandonado y el año pasado el ayuntamiento invirtió 43.000 euros para limpiarlo tras la negativa de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT). En ese sentido deja claro que uno de los ejes más importantes será el medioambiente y puso de manifiesto que el propósito del consistorio pasa también por implicar a los centros educativos.

De hecho, hace una semana en su visita a las instalaciones del Parque del Príncipe ya avanzó, tal y como publicó este diario, su intención de crear una granja escuela para acercar estos usos a los más pequeños. También, por otro lado, el alcalde ya avanzó que supervisará «personalmente» cada tala de árboles que se realice en la ciudad para comprobar que se hace «por un motivo imprescindible» y se creará una ordenanza del árbol.