Es la primera vez en la historia del acuartelamiento de Santa Ana en la que los reclutas en formación no podrán abandonar las instalaciones durante su periodo de formación en las instalaciones. Hasta ahora era habitual que los alumnos durante los descansos del fin de semana regresaran a sus hogares o frecuentaran la capital cacereña, a tan solo unos minutos de la base, pero la dirección del centro ha estimado suspender, al menos en las primeras semanas, las salidas por motivos de seguridad ante la crisis sanitaria. Debido a esta situación insólita, fuentes del centro aseguran que trabajan en alternativas para sobrellevar al ‘confinamiento’ en la base. Entre ellas, han previsto una zona más amplia de asueto --el centro ya cuenta con cantina y pistas deportivas-- y estudian organizar sesiones de cine relacionado con los valores de la vida militarcon coloquios posteriores a la proyección y actividades a campo abierto aprovechando la amplitud de las instalaciones.