Aumentan las aves rapaces en la Sierra de la Mosca

La Sociedad Extremeña de Zoología ha enviado a la Junta de Extremadura los resultados de un trabajo de avistamiento de aves rapaces durante los meses de verano en la Sierra de la Mosca junto a la ciudad de Cáceres, que constata que el lugar es de vital importancia para algunas poblaciones de rapaces, el aumento de la población de algunas de ellas muy protegidas y como nexo de unión entre los tres corredores ecológicos naturales presentes en la región de Extremadura: el corredor del sistema central, el corredor de Sierra Morena-Montes de Toledo y el corredor Portugués.

La Sierra de la Mosca es el mayor oasis de biodiversidad de la ciudad de Cáceres (declarada Patrimonio de la Humanidad desde el año 1986), las estribaciones de la sierra se sitúan a unos escasos metros del centro de la capital y además también acogen el santuario de la Virgen de la Montaña. Tras el abandono progresivo de la explotación olivarera de la zona a partir de mediados del siglo XX dando paso a un uso recreativo de la sierra para los cacereños y las cacereñas, importantes poblaciones de aves rapaces protegidas se han ido instalando en ella, hasta el punto de poder observar águilas imperiales, búhos reales y cigüeñas negras en la sierra.

La combinación de un bosque mediterráneo bien conservado, grandes roquedos en los que anidar y dormir y una extensión de llanos y dehesas donde alimentarse rodeando la sierra ha hecho que en los últimos años la presencia de aves rapaces cada vez sea mayor, haciendo hincapié en la alta presencia de buitres negros, especie incluida en el Catálogo Español de Especies Amenazadas.

Alejandro Palomo Rey, presidente de la Sociedad Extremeña de Zoología, recuerda que «sabíamos que la sierra es una joya geológica, botánica y faunística, pero ha sido tras este estudio de observación cuando nos hemos dado cuenta de la importancia del lugar para la conexión de las distintas poblaciones de aves de Extremadura y lo que más nos ha sorprendido es que haya tal densidad de aves protegidas a tan pocos metros de una ciudad de 100.000 habitantes».

Durante las jornadas de avistamiento este verano, «hemos podido contabilizar agrupaciones puntuales de hasta 400 buitres leonados en vuelo y posaderos de hasta 60 buitres leonados y 10 buitres negros, además de agrupaciones premigratorias de más de 100 milanos negros, varias parejas de alimoches, águilas calzadas, águilas imperiales, águilas culebreras, halcones peregrinos, cernícalos primillas y vulgares…»

Estos datos, a juicio de la Sociedad, le dan aún más sentido a la propuesta realizada por más de 50 asociaciones a la Junta de Extremadura para declarar la Sierra de la Mosca Paisaje Protegido en julio de 2019 y así poder proteger la multitud de valores que guarda, valores ambientales, culturales, prehistóricos, ecosistémicos, económicos y recreativos.

Y concluye: «Somos miles de personas las que esperan que pronto la Junta de Extremadura declare la Sierra de la Mosca Espacio Protegido».