• 1990. Cobra fuerza la petición de una autovía Cáceres-Badajoz. La Junta se negaba al entender que no había suficiente tráfico.
  • 2002. El entonces alcalde de Cáceres, José María Saponi, pide abiertamente esta infraestructura. Le apoya el alcalde pacense.
  • 2006. En abril, la Asamblea de Extremadura rechaza por cuarta vez la posibilidad de transformar la Ex-100 en autovía.
  • 2006. En mayo, el presidente de la Junta, Rodríguez Ibarra, anuncia que la autovía se hará con un presupuesto de 360 millones de €. Justifica este cambio por motivos de desarrollo económico, puesto que Badajoz tendría una plataforma logística, y a Cáceres llegaría El Corte Inglés. Los ecologistas se oponen. En noviembre comienza el desdoblamiento de 5 km. en el acceso a Badajoz.
  • 2008. La Junta anuncia que la autovía estará en funcionamiento en 2011 con el nombre Ex-A4. De los tres corredores planteados se opta por el que discurre junto a la carretera actual.
  • 2009. La futura infraestructura recibe la declaración de impacto ambiental. Se licitan los proyectos de los cuatro tramos. El Gobierno se compromete a abonar 300 millones. Llega la crisis.
  • 2016. Se cierra el trámite de la obra al no haberse acometido.
  • 2019. El 5 de marzo, la Junta y el Gobierno acuerda la cesión de esta carretera al Estado para que se encargue de construir definitivamente la autovía. Será una prolongación de la A-58: Trujillo-Cáceres- Badajoz. La cesión se firma el 14 de junio.
  • 2019. En septiembre se aprueba el expediente de información pública y el proyecto definitivo del primer tramo (71 millones), con 13 km. que incluyen 2 viaductos, 8 pasos superiores y 1 inferior.
  • 2020. A final de año comienza la ampliación de la glorieta en la que arrancará la autovía desde Cáceres.