El gobierno municipal de Cáceres espera recibir del Ministerio de Hacienda una subvención para el transporte público de más de 1,3 millones de euros. Esta aportación, que triplica la de años anteriores, ayudará a afrontar el déficit del servicio de autobuses urbanos, que se ha disparado en el último año por, entre otros motivos, la reducción de aforos y la disminución del número de viajeros a causa de la incidencia del covid. 

En el presupuesto de 2021 se prevé que el déficit del transporte público ascienda a 4,6 millones de euros, es casi un millón y medio más que en los años anteriores. La previsión al inicio de 2020, antes de que se notasen los efectos del coronavirus, fue de 3,2 millones, una cantidad parecida a la que se planificó en los ejercicios anteriores. Entre los años 2014 y 2019, desde que se inició la nueva concesión de la gestión del servicio a Subus, se había logrado controlar el déficit de los autobuses, dejándolo en torno a los 3 millones de euros. En 2020 se disparó, primero tuvo que ampliarse el crédito de la partida de 3,2 millones de euros, se incrementó con otros 750.000 euros. A esto se sumó el precio de 233.728 euros de las modificaciones aprobadas en diciembre y que entrarán en vigor el martes. 

El aumento de costes y la reducción de usuarios, en 2020 se perdieron 1,8 millones de viajeros con la consiguiente reducción de la recaudación, dan como resultado que el déficit que se calcula para 2021 sea de 4,6 millones de euros. Los servicios económicos del ayuntamiento plantearon el pasado año, en su informe de fiscalización de las modificaciones que entran en vigor ahora, hacer ajustes para reducir los gastos que tienen los autobuses urbanos. En su informe económico-financiero de los presupuestos de 2021 también consideran que el crédito asignado este año para atender el déficit de los autobuses urbanos «puede resultar insuficiente». 

 Las liquidaciones que presenta Subus, empresa que tiene la concesión del servicio, no se corresponden a un periodo de enero a diciembre, sino que van desde el 1 de junio de un año al 31 de mayo del siguiente porque la nueva concesión se inicio en junio de 2014.

DÉFICIT / Hay dos servicios que presta el ayuntamiento que tienen déficit, uno son las piscinas municipales y el otro son los autobuses, ambos los presta una empresa que tiene la gestión en concesión. Este déficit obedece a que los costes están por encima de lo que se recauda con la tarifa. La diferencia se sufraga con cargo al presupuesto del ayuntamiento, que en el caso del transporte público recibe una ayuda del Ministerio de Hacienda.

Esa subvención que procede del Estado ha oscilado en los últimos años en una cantidad anual que ha estado entre los 350.000 y los 400.000 euros. En los presupuestos de este año se prevé un ingreso de 700.000 euros, pero finalmente será superior, de 1,3 millones, según los cálculos que maneja el gobierno local. El Ministerio de Hacienda podría hacer público en unos días el importe definitivo.

En su informe económico sobre los presupuestos de 2021, el interventor del ayuntamiento pidió prudencia en la consignación de una partida de 700.000 euros porque no había una base para su incorporación, dado que esa subvención del Estado podía ser mayor. En ese informe se precisa que cuando se confeccionaron los presupuestos de 2021 esa aportación extra del Estado era una hipótesis que no se debía considerar en las cuentas municipales.

El pasado verano, dentro de las medidas que se anunciaron por el Gobierno para paliar los efectos económicos causados por el coronavirus, se adelantó que habría un incremento de las aportaciones que se dan a los ayuntamientos para hacer frente a las pérdidas de sus transportes públicos. El criterio que se anunció para esa aportación extra era la de poner por parte de Hacienda un 33% de los ingresos obtenidos por la recaudación del servicio de los autobuses antes de la crisis del covid.

El servicios de autobuses tuvo el pasado año 2,7 millones de viajeros, fueron 1,8 menos que los que se registraron en 2019. La línea 2, que en 2019 llegó a sumar hasta 900.000 viajeros, se quedó con 436.000. La línea 8 pasó de 896.000 a 552.000. Yla línea del campus, otra de las más utilizadas, bajó de 800.000 a 420.000. Durante gran parte del confinamiento, el autobús fue gratuito.

Los cambios en las líneas del autobús que entrarán en vigor el 1 de junio

La frecuencia de paso de la línea 1 pasa de 12 a 15 minutos y queda con un bus menos

La línea 1, que comunica Aldea Moret con Barrio Nuevo, pasará a tener una frecuencia de paso de 15 minutos frente a los 12 que ha tenido hasta ahora. En la cabecera de Aldea Moret la primera salida será a las 7.00 y la última a las 22.45. En la de Barrio Nuevo, en el colegio de las Delicias, la primera será a las 7.05 y la última a las 22.50. Se reduce la frecuencia de paso al retirar uno de los autobuses de la línea, que pasa a la 8. La línea 1, que estuvo entre las que tenía más usuarios, ha perdido casi la mitad de sus viajeros, de 912.781 que tuvo en 2005 pasó a los 544.406 en el año 2019. 

La línea 3 que va hasta el nuevo hospital solo llegará hasta Veterinaria en los días lectivos 

Es una modificación cuyos efectos no se notarán realmente hasta el mes de septiembre, que es cuando se inicia el periodo lectivo que se prolonga hasta mayo. Su frecuencia de paso se mantiene en 20 minutos las mañanas de los días de diario y en 25 por las tardes. Los sábados, domingos y festivos queda en 30 minutos. En septiembre esta línea solo llegará hasta la parada de la facultad de Veterinaria por las mañanas, reduce así su trayecto por el campus universitario. Entre junio y agosto por las mañanas entrará hasta la facultad de Formación del Profesorado, que es la última parada en el campus. 

El cambio de la línea 5 entrará en vigor cuando se abra al tráfico la ronda este 

Los cambios en la línea 5 no serán operativos hasta que la ronda este se abra al tráfico. En la actualidad esta línea tiene una de sus cabeceras en Charca Musia, frente a la gasolinera. Cuando la ronda este se abra al tráfico, está previsto que sea a mediados de junio, los autobuses llegarán hasta la nueva rotonda de conexión con la carretera de Miajadas. Es una modificación para dar servicio a la urbanización de Vistahermosa. Se crean cinco nuevas paradas, dos de ellas dentro de Vistahermosa, y se eliminarán tres de las paradas actuales. La cabecera de la línea seguirá estando en el polígono de Charca Musia, en el cruce de la avenida de Cervantes con la ronda de San Francisco. 

La línea 8, que es la que tuvo más viajeros en 2020, queda con una frecuencia de 15 minutos

Es uno de los cambios más importantes que entrarán en vigor el día 1 ya que afecta a la línea del autobús que tuvo más viajeros en 2020, la 8, que conecta la urbanización de Sierra de San Pedro con Cáceres el Viejo. Su frecuencia de paso por las mañanas se reduce cinco minutos, pasará de los 20 actuales a los 15 que tendrá a partir del martes. Esta reducción de los tiempos de espera se produce al incrementarse el número de autobuses que dan servicio por las mañanas, de los cuatro que ahora están operativos se pasará a seis. Su frecuencia por las tardes seguirá siendo de 20 minutos.

La línea 4 llegará hasta el Cefot en todos sus viajes y no solo en los que va a Valdesalor

Los autobuses de la línea 4 llegarán hasta el Cefot en todos sus viajes. Hasta ahora solo se desplazan hasta el centro militar en los cuatro viajes en los que el autobús llega hasta la entidad local menor de Valdesalor, en el resto de recorridos se queda en el Ceres Golf. Desde este martes llegará al Cefot en todos los viajes. La frecuencia de paso será de 30 minutos en los días laborales y de 45 el resto de días.

Hay una sexta modificación que afecta a la línea 2, se trasladan las paradas de los números 38 y 42 de la avenida de la Bondad a la calle Colombia.