El Juzgado Contencioso Administrativo número 1 ha admitido parcialmente el recurso interpuesto por la empresa Salud Mental Inserta S.L. por el que se obliga al Ayuntamiento de Cáceres a reparar las deficiencias de la piscina principal del complejo deportivo Guadipark, que la entidad gestiona desde 2013 a través de una concesión municipal.
El fallo, al que ha tenido acceso este diario, reconoce el mal estado del vaso y la necesidad de arreglo dada las fugas y averías que presenta esta piscina, que suponen «pérdidas ingentes de agua de la red principal», informa la empresa que critica que estas averías han sido obviadas por los técnicos del ayuntamiento y el órgano de contratación e Inspección de servicios, dejando a la empresa totalmente indefensa ante la situación. Según expone la sentencia y destaca la empresa en una nota, estas averías, que fueron detectadas desde el inicio de la concesión, supondrían unos gastos de 125.000 euros, aunque esta reclamación no ha sido estimada en la sentencia.
El área de recreo Guadipark se creó en el año 2001 como una mejora al contrato de concesión de aguas que resultó a favor de Canal de Isabel II. El complejo, que fue construido por esta empresa, revirtió al ayuntamiento en 2011 con el fin del contrato de dicha empresa. En 2011 el complejo pasó a manos del ayuntamiento tras el fin del contrato con la empresa. Otro de los problemas que arrastra es que se encuentra en zona protegida para las aves y no tiene licencia de actividad. Esta situación junto al mal estado de la piscina provocan que la empresa «no vea garantías» para la apertura de las piscinas la nueva temporada.
En ese sentido, la empresa critica que estas averías han sido obviadas por los técnicos del ayuntamiento y el órgano de contratación y estudia la opción de resolución del contrato, dado que ha quedo probado el mal estado de la piscina y el desequilibrio que esto ha generado.
La sentencia no es firme y contra ella puede interponerse un recurso de apelación en el plazo de quince días.
