Acerados que obligan al peatón a bajarse a la calzada y que no cumplen con la ordenanza de accesibilidad, espacios desordenados de aparcamientos, una mediana utilizada como parking.... La ronda de la Pizarra, de Cáceres, se ha ido conformando desde los años 60 por la construcción progresiva de distintos barrios, de modo que presenta cierto caos urbanístico y claras deficiencias. Un proyecto de reordenación integral modernizará y dará uniformidad a esta estratégica vía, «que une barrios tan importantes como Casa Plata, Nuevo Cáceres, Las 300, Veracruz y Moctezuma», explica el concejal de Infraestructuras, Andrés Licerán.

La fase 1 de la obra abarcará todo el lateral de los impares que linda con Las 300, desde la avenida de Dulcinea hasta la calle Andalucía. Es la zona más antigua y con mayores deficiencias. Ha salido a licitación por 240.000 €, con un plazo de ejecución de cuatro meses. El ayuntamiento acaba de anunciar que se han presentado tres ofertas de Fervian Vías y Áridos; Construcciones Sevilla Nevado; y Construcciones Hidráulicas y Viales. La apertura de las propuestas será el 27 de diciembre.

Esta zona de la fase 1 tiene ahora acerados muy estrechos y espaciosos carriles. Carece de aparcamientos y en su defecto se utiliza la mediana pavimentada. La solución se centrará en ampliar la acera hasta 3 metros, moviendo los carriles hacia dicha mediana. Para asegurar una protección adecuada a los peatones en esta franja media, ya en la fase 2 (que reordenará los impares desde la calle Andalucía hasta la avenida de la Hispanidad) se optará por reducir los carriles, ahora de gran anchura. La pérdida de continuidad entre las dos fases se subsanará con una glorieta en la intersección de la Pizarra con calle Andalucía, que a su vez mejorará el cruce.

Reformas en servicios

Las obras incluirán la reforma del firme, la renovación de diez acometidas de la red de abastecimiento (se ha mejorado recientemente y no necesita más actuaciones), la sustitución de las tuberías de saneamiento para cambiar el hormigón por PVC (además de nuevos sumideros, pozos y acometidas), y cinco nuevas farolas para la futura glorieta.

«Es una actuación que dignifica la accesibilidad de los acerados del barrio de las 300, donde viven muchas personas mayores», subraya Licerán, quien además anuncia que la fase 2 dispondrá de 600.000 euros incluidos en el crédito solicitado por el ayuntamiento para inversiones públicas.

Por otra parte, Andrés Licerán también ha informado del inicio de la reforma del alumbrado en la avenida de la Bondad, adjudicada a la empresa González Garrido Moimbra por 91.710 euros, con un plazo de ejecución de tres meses. Se introducirán columnas de cuatro metros y dos luminarias, a fin de mejorar todo el trazado y garantizar la seguridad en el uso nocturno de la vía, tanto de los acerados como de la calzada, y evitar también accidentes. Se trata de uno de los espacios incluidos en el mapa de puntos negros de la ciudad, ya que la fronda de los árboles reduce el nivel lumínico.