Los vecinos de la barriada del Junquillo plantean realizar batidas nocturnas debido a los robos que se producen cada madrugada. Los atracos son algo habitual desde hace al menos dos meses, por lo que los residentes solicitan más vigilancia policial por las noches. El principal objetivo de los ladrones son los vehículos aparcados en la calle. Rompen las lunas y las ventanillas para llevarse todo lo que encuentran en su interior.
Hace unos días de uno de los coches se llevaron el mando a distancia que abre la puerta del garaje de uno de los edificios del barrio. Esto ha obligado a la comunidad a cambiar los códigos del todo el bloque por seguridad, para evitar que los ladrones pudieran acceder a los trasteros o a las viviendas de los vecinos. Han robado prácticamente en todos los vehículos estacionados en la vía pública y en algunos casos hasta en dos ocasiones. Así como en el bar y en los locales.
No es la primera vez que este barrio es objetivo de los cacos. Hace unos meses también sufrieron robos en los pisos y otros muchos habían sido marcados por los ladrones para comprobar si la casa estaba habitada. Colocaron plásticos en las puertas, que se caen una vez que estas se abren. Cuando los ladrones vuelven al domicilio y comprueban que el marcador continúa en la puerta proceden a asaltar la vivienda. Es uno de los modus operandi más habituales entre las bandas.
Los vecinos afectados se han reunido para plantear la organización de vigilancias nocturnas, con el objetivo de intimidar a los asaltantes. Y reclaman más presencia policial, ya que la barriada, al ubicarse en el extrarradio, suele estar vacía por las noches. Desde el ayuntamiento aseguran que no han recibido ninguna denuncia al respecto pero que incrementarán la vigilancia.
