Los bomberos tuvieron que acudir el pasado jueves al restaurante Oquendo de Cáceres, situado en la calle Obispo Segura Sáez, alertados por la llamada de su chef y titular, Pablo Medrano, quien acababa de hallar un enjambre en la parte interior de la tapa de un contenedor fuera de uso, en el patio.

«Llevaba días notando la presencia de demasiadas abejas, pero no eran agresivas. Cuando levanté la tapa había miles y miles», describe.

Los bomberos precintaron el recipiente con plástico y se lo llevaron para sacar el enjambre en otra ubicación, ante la sorprendida mirada de los clientes. 

Con la llegada de la primavera, proliferan los enjambres como ocurrió hace unos años en un colegio de Badajoz.