Doble sesión de Luigi Pirandello en el comienzo del Festival de Teatro de Badajoz. La suspensión de El avaro , que debía abrir mañana las funciones, a causa de la enfermedad del actor Juan Luis Galiardo, ha propiciado que dos montajes basados en la obra del Nobel italiano de 1934 coincidan este fin de semana en el encuentro pacense. Pero el festival tendrá hoy un preámbulo callejero, un pasacalles de música, artefactos, zancos y monociclos, que recorrerá el centro de Badajoz a las 20.00 horas (la calle Obispo, plaza de España, la calle de la Soledad y su plaza, la calle Francisco Pizarro, la calle Menacho y el paseo de San Francisco).

´Tantas voces´ . "El teatro de Pirandello se conoce muy mal", afirma Natalia Menéndez. La actriz y directora (actualmente del Festival de Teatro Clásico de Almagro) explica que la obra por la que se recuerda al escritor italiano, Seis personajes en busca de autor , es uno de los múltiples Pirandellos que uno puede hallar en su producción. En Tantas voces... , el espectáculo que abre mañana las funciones del festival de Badajoz (teatro López de Ayala, 21.00), hay otros posibles: el farsesco, el simbólico, el poético... Todos ellos proceden de Cuentos para un año . El escritor italiano quería ofrecer a sus lectores un cuento cada día, pero la muerte le impidió completar su voluntad. Los 241 que quedaron componen un mosaico de la Italia del sur de principios del siglo XX. A partir de una selección, Natalia Menéndez (Madrid, 1967) estrenó el pasado año Tantas voces... .

Siete actores interpretan casi cuarenta personajes, y este hecho enlaza con una de los motivos pirandellianos: "Uno puede ser uno, ninguno o mil", afirma. "Y esa idea de ser muchos y no ser nadie forma también parte del juego que hacen los actores del montaje". Pero hay otras cuestiones actuales que asoman en estos relatos llevados a la escena. "Cuando un autor de la altura de Pirandello cuenta una anécdota que ocurre a principios de siglo, supera cualquier época", dice la directora sobre esa actualidad que plasma en Tantas voces... : el miedo a vivir y a la vez el deseo de vivir, el temor a perder un trabajo, la forma en que unos juzgan a otros...

Después del estreno de Tantas voces... Natalia Menéndez fue elegida directora del festival de Almagro y dirigió Realidad para el Centro Dramático Nacional. El montaje quedaba atrás en el tiempo, pero su directora no lo ha olvidado. "Le tengo especial cariño porque no sueles encontrar autores como él. Y además he vuelto a revisarlo porque hubo que sustituir a algún actor".

´La función por hacer´ . Según Alfred Hitchcock, la historia debe comenzar en lo más alto y después seguir ascendiendo. "Al público hay que zarandearlo para que se sienta en una montaña rusa", corrobora Miguel del Arco. Y así debieron sentirse a finales del 2009 los primeros espectadores de La función por hacer (el domingo en el López de Ayala, a las 21.00), una de las sensaciones teatrales de los últimos años.

Como todo hallazgo insólito, este tiene también una prehistoria singular. Del Arco, al frente de la compañía Kamikaze, estrenó casi de tapadillo, en funciones de fin de semana que comenzaban a las doce de la noche en el vestíbulo del teatro Lara.

Querían representar como fuera esta versión de Seis personajes en busca de un autor de Luigi Pirandello. Para ahorrar costes, la escenografía era casi inexistente; bastaban los actores. Y algo parecido a lo milagroso sucedió. Quienes veían la función y salían entusiasmados la recomendaban. Los nuevos espectadores volvían a comentarla y la sala empezó a registrar llenos. La crítica descubrió el montaje y lo elevó a los altares. Tras terminar en el Lara, el Teatro Español la programó en su sala pequeña. No se veía nada parecido hacía tiempo.

"El público se conmocionó con nosotros", recuerda Miguel del Arco, coautor de esta versión y su director. Habla desde el tren, camino del festival Temporada Alta en Gerona, donde presenta La violación de Lucrecia , con Nuria Espert.

¿Pero qué tiene este montaje de especial? De entrada, el espectador se ve sorprendido por el comienzo de la obra, cuando cuatro personajes (dos parejas) interrumpen en el teatro la representación de una obra que representan un pintor y su novia.

"El comienzo es hilarante, y a través del humor el público va entrando en la obra, y esta le va haciendo pensar". El giro argumental se produce cuando el pintor y la novia pasan a ser director y actriz e interpelan a los personajes, cuyo relato aquel quiere convertir en una pieza teatral. Esta reflexión pirandelliana sobre el propio teatro es puesta al día por del Arco, que ambienta la obra en el presente.

La intensidad de la interpretación, los inesperados golpes de efectos, la "honestidad y la libertad" con que está realizado el trabajo desembocaron en su éxito, según Del Arco.

Actor, guionista, director de teatro y cine, Del Arco rebaja la importancia de sus dedicaciones. "Solo es que me meto en todos los charcos, no tengo medida. Basta que me digan que algo no se puede hacer para que lo haga. Soy un hombre de escena a la antigua usanza, es decir, que igual dirijo que traslado los muebles de un sitio a otro, que no necesita dinero para crear, aunque esta tarea es colectiva".