Óbito

Carmen Sevilla, tesoro de España: la vida entre cámaras y coplas de la artista perfecta

Desde bien pequeña dio muestras de un talento que la llevó a encandilar al gran público como actriz, cantante y presentadora. Hasta Charlton Heston se quedó prendado de una belleza que traspasó fronteras

En 2012 hizo público que sufría alzheimer, una enfermedad que apagó su memoria durante más de una década

María del Carmen García Galisteo, conocida en España y en el mundo como Carmen Sevilla, era uno de los últimos grandes símbolos de la copla española, esa generación de oro que encarnaron también Rocío Jurado, Rocío Durcal, Lola Flores o Concha Piquer. Su nombre quedará también eternamente ligado al cine español, una industria donde lo fue todo hasta que su memoria se fue apagando. Todo un país llora ahora su pérdida a los 92 años tras una larga lucha contra el alzheimer.

La barriada de Heliópolis de Sevilla vio crecer a esta artista y cantante desde que nació un 16 de octubre de 1930. Sus expresivos ojos y su cautivadora sonrisa acapararon pronto las pantallas del cine y la televisión española. Era la época en la que la población intentaba evadirse de la posguerra con sus nuevos televisores, unos aparatos que daban sus primeros pasos para quedarse en los hogares de todo el mundo.

A los 13 años, Carmen Sevilla ya debutó en los escenarios como bailarina en la compañía de una de las artistas consagradas de la época, Estrellita Castro, para la que escribían canciones su abuelo y su padre. Los contactos de sus familiares y el pronto cambio de aires del sur a la capital, donde las oportunidades eran mayores, hicieron que la carrera artística de la sevillana comenzara antes de cumplir la mayoría de edad.

El salto a la gran pantalla, entre películas de carácter folklórico donde la artista cantaba y bailaba, lo hizo en el 1948 con una aparición esporádica en 'Jalisco canta en Sevilla', donde compartió casting con Jorge Negrete. Cuatro años después, realizó uno de sus grandes papeles como protagonista en 'Violetas imperiales' con Luis Mariano, actor con el que la química en la pantalla le hizo repetir en otros largometrajes como 'El sueño de Andalucía' y 'La bella de Cádiz'. Dentro de su larga lista de trabajos en la gran pantalla, la sevillana participó en la primera película española candidata al Premio Oscar a la Mejor Película de habla no inglesa en 1957 del director Juan Antonio Bardem, 'La Venganza'.

Una progresión imparable

Su éxito fue creciendo de la mano de superproducciones como 'Rey de reyes' en 1961, donde interpretó a María Magdalena, o a las órdenes de Charlton Heston, que quedó prendado de la artista, en la película 'Antonio y Cleopatra' en 1972, que cuenta una vez más el apasionado romance entre el general romano y la reina Cleopatra, en la que la española interpreta a Octavia, la esposa de Marco Antonio. Además, su fama traspasó las fronteras de España a las órdenes de directores como Don Siegel o Alessandro Blasetti.

La carrera de Carmen Sevilla no solo transcurrió por las grandes pantallas, también tuvo cabida en las televisiones privadas demostrando otra faceta como presentadora. Así fue como la sevillana copó las noches coordinando la salida de las bolas millonarias del cupón de la ONCE.

Carmen Sevilla, en su época como presentadora de la ONCE.

Carmen Sevilla, en su época como presentadora de la ONCE. / EFE

Poco a poco, la vida de la artista española fue tranquilizándose hasta el punto de alternar su presencia nocturna en los estudios de Telecinco en 1989 con la cría de ovejas en una explotación ganadera en tierras de Badajoz, siendo nombradas sus “ovejitas” en algún que otro comentario en sus apariciones en la televisión por la noche.

El cambio de siglo significó para la artista española una vuelta al sector en el que mejor se movía y que la había visto crecer dentro de su larga carrera en la fama, el cine español. Los españoles pudieron disfrutar de la sevillana todos los sábados en la cadena pública de TVE gracias al programa 'Cine de Barrio', que presentó dando paso a la película de la tarde y se encargó de coordinar la entrevista relacionada con el largometraje emitido.

Su memoria se apagó

A pesar de estar en un terreno donde la sevillana estaba a gusto, el alzheimer se interpuso en su vida, al igual que le sucedió a su madre, lo que le obligó a dejar la pequeña pantalla. Toda su vida pública pasó a un segundo plano tras ingresar en una residencia especializada en esta enfermedad en la localidad madrileña de Aravaca. Sus apariciones públicas se cortaron de raiz y desde 2012, cuando hizo pública su enfermedad, apenas se ha sabido nada del estado de salud de la artista.

La actriz y cantante sevillana dio pie, en sus últimos años, a numerosas imitaciones por parte de varios humoristas debido a sus fallos de memoria y sus descuidos e improvisaciones, pero ella siempre mantuvo una innata espontaneidad y demostró que sabía reírse de sus fallos.