Los vecinos de Jerez de los Caballeros se sorprendían ayer por el triste fallecimiento de un joven de 23 años tras el derrumbe de una obra en el antiguo silo de Jerez de los Caballeros. Un compañero suyo, de 32 años, resultó herido de gravedad en este mismo accidente, aunque está fuera de peligro. Para ambos era su primer día de trabajo y tenían como cometido rehabilitar la bóveda de la báscula, cuyo suelo iba a convertirse en un escenario. Fue esta bóveda la que se desplomó quedando atrapados bajo los escombros los dos trabajadores.

Hasta el lugar de los hechos se desplazó una dotación del parque de bomberos del municipio, que realizó las labores de rescate durante unos veinte minutos. Además, acudieron dos unidades medicalizadas del Servicio Extremeño de Salud y una ambulancia convencional que prestaron asistencia sanitaria en el lugar del siniestro sin poder hacer nada por salvar la vida del joven. Era la única reforma que restaba para inaugurar el Espacio para la Creación Joven, que albergaba este silo. Su responsable, Antonio Castilla, informó ayer de que el resto de las dependencias estaban terminadas y que las obras del escenario se iniciaron ayer.

El fallecido, que responde a las iniciales de J.C., pertenece a una de las familias más conocidas y extensas del pueblo, con lo que la tragedia ha afectado especialmente a los vecinos de la localidad pacense. La mayor parte de los jerezanos conoce dónde viven y su sobrenombre, los pinchas . El joven, que vivía con sus abuelos en la Ermita de San Lorenzo, tenía un hijo con una mujer de la que estaba separado. En el accidente laboral resultó herido otro trabajador, A.G.G., de 32 años. Este fue trasladado al Hospital Infanta Cristina de Badajoz y se encuentra en estado grave aunque fuera de peligro. Casado y con dos hijos, sus más allegados confían en que evolucione favorablemente.

A lo largo del día de ayer, efectivos de la Cruz Roja prestaron atención psicológica a los familiares, muy afectados por la pérdida. El cadáver del joven fue trasladado a Zafra, donde se le iba a practicar la autopsia y estaba previsto instalar, en la noche de ayer, la capilla ardiente en el tanatorio jerezano.

Por el momento se desconocen las causas del siniestro, pero técnicos de UGT y CCOO estaban ayer en la zona para elaborar un informe. Si de este se deriva que hubo responsabilidad penal, la Fiscalía especializada actuaría de oficio, según explicó Antonio Flores, responsable de Salud Laboral de la Federación del Metal, Construcción y Afines de UGT (MCA-UGT). "Cuando hay un accidente y más con estas consecuencias, siempre hay un fallo", lamentó.