El Servicio Extremeño de Salud (SES) conocerá este lunes si la cepa del brote de covid-19 detectado en el grupo de esquiladores uruguayos asentados en Extremadura corresponde a la variante brasileña del virus. El foco acumula ya 43 casos activos y se están haciendo rastreos en Aragón y Andalucía, donde fueron otras cuadrillas que compartieron viaje en autobús con los afectados. 

El consejero de Sanidad, José María Vergeles, ya advirtió de la dimensión del brote vinculado a este grupo de esquiladores, contratados por un empresario extremeño, dado que han estado en contacto con 34 explotaciones ganaderas de nueve localidades. 

En todas ellas se ha puesto en marcha un plan de cribados preventivos, especialmente en Navalvillar de Pela, donde están asentados los esquiladores. Este pasado sábado se realizaron 236 test de antígenos entre los vecinos que desearon participar en el cribado y todas las pruebas han arrojado resultados negativos. No obstante, se seguirán realizando test hasta el próximo martes en este mismo municipio (tras la detección del brote ha confirmado 13 nuevos positivos) y en otros afectados como La Coronada o Madrigalejo, donde también se han contabilizado casos.  

Según Vergeles, el brote se controla «adecuadamente» gracias a la colaboración de los alcaldes y a la buena respuesta del protocolo diseñado para prevenir la infección de los temporeros durante las campañas agrícolas. Actualmente, los esquiladores contagiados se encuentran en aislamiento en un hostal de Navalvillar de Pela, donde están recibiendo asistencia sanitaria y de manutención.